La provincia de A Coruña es una auténtica caja de sorpresas: El verde de sus montes, el azul de su mar, escarpados acantilados, playas de ensueño, el sabor de su gastronomía… Por eso hemos preparado una ruta de cinco días para ver, conocer y descubrir la provincia de A Coruña, tanto las zonas de mayor interés turístico, como esos pequeños rincones llenos de magia que pasan desapercibidos con frecuencia.
Presentamos una ruta de cinco días para ver y conocer los mejores lugares de la provincia de A Coruña
Ahí va nuestra ruta de los lugares que deberías ver en la provincia de A Coruña:
Día 1
Ortigueira y Cedeira
Ortigueira
El punto de partida de esta ruta de cinco días por A Coruña es Ortigueira, uno de los municipios más hermosos de las Rías Altas. Esto es, por sus playas salvajes y rocosas, su patrimonio celta y uno de los espacios naturales más espectaculares de toda Galicia: los acantilados de Loiba.
Desde lo alto de los acantilados, de entre 80 y 160 metros de altura, se observa en primer término al magnífico arenal de Loiba y un mar vigoroso que esculpió la Pena Furada, roca monumental que soporta los envites del mar a través de sus arcos. En la lejanía, el cabo Ortegal termina la escena por la parte oeste, siendo el punto óptimo para su observación el conocido Banco de Loiba. La belleza del paisaje es tal, que se ha catalogado este banco como «El mejor banco del mundo». Puede sonar algo pretencioso o exagerado, pero realmente es una experiencia única que incluso ha hecho llorar a más de uno.
Cedeira
Una vez finalizada nuestra visita, viajamos a Cedeira, que está aproximadamente a media hora de distancia por carretera. El buque insignia de este municipio coruñés son los imponentes acantilados de Vixía de Herbeira, de 613 metros y los cuartos de mayor altura en Europa tras los de Hornelen, Cabo Enniberg y Croaghaun. La fuerza del viento, el olor del mar y la imagen de las potentes olas chocando contra una costa verde esmeralda son el argumento que ofrece este mirador, antiguo punto de vigilancia de la costa como muestra la vieja construcción de 1805, conocida como Garita de Herbeira.
Justo al lado de este acantilado, en la Sierra de la Capelada, encontramos el santuario de San Andrés de Teixido, un rincón de obligatoria visita al que «irás de muerto si no vas de vivo». La leyenda cuenta que hay que peregrinar alguna vez en la vida a San Andrés para presentar tus respetos al santo, pues quien no lo hace corre el riesgo de volver al pueblo reencarnado en un pequeño animal.
Además, deben cumplirse una serie de ritos para evitarlo: coger una piedra en el camino para depositarla en alguno de los “milladoiros” (montículos de rocas depositadas por los peregrinos) que encontrarán a su paso; besar la pequeña imagen del santo que hay en el interior del santuario; visitar la fuente milagrosa o confeccionar el ramo de San Andrés. Otro de los ritos del lugar estaba relacionado con la famosa Herba de Namorar, la planta de los enamorados y símbolo del amor en Galicia por antonomasia, aunque en la actualidad se ha visto afectado por el hecho de que se trata de una especie en peligro que no debe ser arrancada.
Día 2
Pontedeume, Oleiros y Sada
Pontedeume
Esta pequeña villa a medio camino entre A Coruña y Ferrol ofrece, a partes iguales, un patrimonio histórico y natural digno de descubrir; perfecta para esta ruta de cinco días por la provincia de A Coruña. Su principal atractivo reside en las Fragas do Eume; un parque de más de 9.000 hectáreas atestadas de robledales, castaños, abedules y helechos del período Terciario, entre otros tipos. Tal es la importancia de este espacio que sus fragas están consideradas como uno de los mejores ejemplos de bosque atlántico de toda Europa.
Debido a su enorme extensión, no es posible hacer un recorrido completo en tan sólo una jornada, por lo que os recomendamos hacer una de las rutas que llevan a los puentes colgantes.
También podéis visitar el Monasterio de Caaveiro, ubicado en el corazón de las fragas. El camino es un poco más largo que los demás, pero es ameno y en verano hay un minibús que te deja casi a los pies del místico y particular convento.
Oleiros
Oleiros, además de su amplia oferta cultural, festiva y gastronómica, dispone de un paisaje costero excepcional y rutas de senderismo que nos acercan a faros y furnas. El castillo de Santa Cruz es una visita imprescindible; una pequeña fortaleza situada en un islote al que se accede por medio de una pasarela peatonal.
Además, si te interesa conocer más sobre la cultura de este municipio, te recomendamos visitar el museo dos Oleiros. Acoge una colección única en Europa de cerámica popular, y es sede de una de las ferias más importantes de España, que cada año recibe de brazos abiertos a cientos de ceramistas que exponen sus piezas.
Sada
Esta localidad marinera es perfecta para conocer y pasear en cualquier momento del año, aunque la primavera y el verano sean dos estaciones ideales para poder disfrutar de su localización costera. La Terraza, un particular edificio concebido como kiosco-restaurante en 1912, es de obligatoria visita para los amantes del art noveau y la arquitectura.
Día 3
A Coruña y Santiago de Compostela
A Coruña
Esta ciudad cuenta con innumerables planes y zonas que visitar, desde playa, hasta zona histórica y parques o espacios naturales. Un buen sitio para comenzar a visitar la ciudad es en la Torre de Hércules, este es un monumento histórico de visita obligada si pasamos por la ciudad herculina. Tiene una altura de 55 metros, y data del s. I d. C, tiene el privilegio de ser el único faro romano y el más antiguo en funcionamiento del mundo.
Para continuar con la visita por la ciudad, visitar el casco viejo de la ciudad donde se puede callejear y disfrutar de los antiguos edificios que rodean estas pequeñas calles hasta llegar a la Plaza Azcárraga, una plaza que ha sido elegida como la más bonita de toda la ciudad gracias a sus frondosos arboles y sus esculturas.
Santiago de Compostela
En esta ruta de cinco días por A Coruña no podíamos olvidar nuestra capital que, si bien es pequeña en tamaño, está llena de historia y lugares para conocer y visitar que combina su aire ancestral con bellas zonas verdes y un aire juvenil aportado por su gran tradición universitaria. Es por eso que hemos decidido dedicarle parte de dos jornadas a su visita. Comenzando la visita con la zona más emblemática de la ciudad, la Catedral de Santiago de Compostela, construida entre 1075 y 1211, muestra una combinación de estilos arquitectónicos: barroco, románico y gótico. En ella se encuentra la tumba de Santiago Apóstol. Puede visitarse por dentro y hasta subir al tejado de esta y disfrutar de las vistas de la ciudad.
Además, la plaza do Obradoiro es considerada una de las más bonitas de toda Europa. Os recomendamos sentaros a descansar en el pavimento pedrado y disfrutar de esta construcción románica con acabados góticos.
Tras pasar bajo el Pórtico de la Gloria podrás admirar las capillas interiores, los ornamentados techos y columnas y el Museo Catedralicio.
El Parque de La Alameda muestra que en Santiago de Compostela, además de mucha historia, hay también bellos espacios al aire libre que visitar. Sus robles, eucaliptos y castaños de indias proyectan sombras que se agradecen en los calurosos días de verano y cobijan del aire durante el duro invierno gallego. En cualquier época del año, es un buen reducto de paz casi en plena Ciudad Vieja.
El Mercado de Abastos es uno de los lugares más coloridos que ver en Santiago de Compostela. Desde el último cuarto del siglo XIX, el interior del bello edificio situado en la Rúa das Ameas se alinean los distintos puestos de mariscos, pescados, carnes, quesos, verduras, frutas, y muchas cosas más.
Alrededor de la catedral se extiende una maraña de callejuelas que se encuentran entre las más bellas que ver en Santiago de Compostela. Vagabundea entre las plazas escondidas – como la de Cervantes -, bellas estatuas, ornamentadas fuentes y casas bajas. Pasea por las míticas Rúa do Franco (también conocida con el sobrenombre de “Calle de los Vinos”), Rúa do Vilar y Rúa Nova y siente la atmósfera de una ciudad legendaria.
Día 4
Santiago de Compostela, Muxía y Fisterra
Santiago de Compostela
Durante la mañana de este cuarto día os proponemos alejaros un poco del casco antiguo y visitar la Ciudad de la Cultura. Una auténtica experiencia arquitectónica diseñada por Peter Eisenmann, ubicada cerca del Monte do Gaiás. Es un espacio de digna visita en el que, usualmente, podemos disfrutar de diferentes exposiciones e incluso conciertos.
Justo al lado de este edificio está o Monte Viso, que ofrece una ruta de senderismo mitológica llena de trasnos, mouros, cocas y urcos. Por cada recoveco de este monte se pueden encontrar esculturas de estas criaturas. Este camino está pensada para disfrutar de la naturaleza y de las increíbles vistas panorámicas de la ciudad. Sin duda un espacio de lo más particular para completar nuestra ruta de cinco días por A Coruña.
Hay un aparcamiento bastante amplio y una zona con mesas ideal para almorzar antes de emprender rumbo hacia nuestro siguiente destino.
Muxía
Muxía es un pequeño pueblo costero que lleva consigo una extensa tradición de secaderos artesanales de congro, de los últimos que quedan en toda Europa. Estas estructuras de maderas podemos encontrarlas en un entorno situado cerca del Santuario de A Virxe Da Barca, de fundamental visita.
Se dice que es el lugar donde la Virgen llegó en barca de piedra para infundir ánimos al Apóstol de Santiago. Sin duda un santuario que impresiona por su cercanía al mar y su paisaje abrupto.
Además, la villa está repleta de rutas de senderismo de diversas dificultades y extensiones. Nosotros os recomendamos el paseo fluvial del río Negro, en el que se pueden encontrar diecisiete molinos restaurados.
Fisterra
A tan sólo treinta minutos en coche de nuestro anterior destino tenemos Fisterra, un municipio de obligatoria visita que ofrece un espectacular atardecer desde su faro más conocido; ubicado justamente en el Cabo de Fisterra. Fue aquí dónde los romanos creyeron que se situaba el fin del mundo conocido (finis terrae) cuando en su conquista de la antigua Gallaecia vieron como el océano se tragaba al sol.
Día 5
Carnota y Porto do Son
Carnota
Para concluir nuestra ruta de cinco días por A Coruña os ofrecemos un paseo por el litoral de la provincia, empezando por Carnota, que dispone de un arenal de cerca de 7 kilómetros; el más extenso de Galicia. Además, es un espacio preservado y totalmente natural, sin haber sido alterado por la mano humana de ninguna manera.
Aunque pertenece al Concello de Dumbría, no podemos dejar de citarla por su cercanía con Carnota y su importancia turística. La Fervenza do Ézaro es una de las más significativas de toda la comunidad autónoma por su salto de cien metros y por ser el único río de Europa que desemboca en el mar en forma de cascada.
Porto do Son
El Castro de Baroña es un tesoro arqueológico a pie de mar y uno de los yacimientos más importantes de Galicia. Tiene forma de península y es el ejemplo más típico y característico de castro marítimo; batido por el mar.
Una playa que se ha hecho famosa en la zona es la Praia das Furnas. Aquí tuvo lugar el desgraciado accidente que dejó tetrapléjico a Ramón Sampedro, oriundo del municipio, cuya historia se llevó al cine con “Mar adentro”. Las escenas de la playa se rodaron aquí mismo. Esta playa es un lugar ideal para desconectar, disfrutar de las vistas y dar por finalizada la ruta de cinco días por A Coruña.
