Castilla y León es olor a lechazo, chimeneas calientes y calles empedradas. Tierra que esconde tesoros incalculables que muchas veces pasan desaparecidos pero, a su vez, son rincones ideales en los que perderse. Con la llegada de la Navidad, la Comunidad se engalana, y es el momento ideal para disfrutar de su gastronomía y descubrir nuevos lugares.
El encanto se sucede por los pueblos de Castilla y León en Navidad, en los que madrugar conlleva conocer los campos de cereales cubiertos de un manto de escarcha. Pero verte recompensado al lado del fuego y con comida que te llenará el alma. Por si aún no conoces sus provincias, te dejamos cinco lugares para disfrutar este mes en el corazón de Castilla.
Cinco destinos para disfrutar de la navidad en Castilla y León
Frías (Burgos)
Enclavado encima del cerro de La Muela y a orillas del río Ebro, Frías es uno de los pueblos más bonitos del norte de Burgos. Desprende un gran encanto, poseedor de un atractivo núcleo urbano medieval, declarado Conjunto Histórico Artístico, en el que destacan de manera especial sus casas colgantes. Uno de sus atractivos es el Castillo de los Duques de Frías, visitarlo es algo imprescindible.
Puebla de Sanabria (Zamora)
Desde que se convirtiera en el pueblo mejor iluminado de toda España gracias Ferrero Rocher y su propuesta «Juntos brillamos más» en 2018, Puebla de Sanabria se ha convertido en uno de los pueblos imprescindibles para visitar en Navidad en Castilla y León. Si este municipio ya es de por sí uno de los más bonitos de la provincia de Zamora, cuando llega diciembre se viste con sus mejores galas y las luces doradas iluminan todos sus rincones. Desde el sábado 3 de diciembre, sus calles lucirán como unas de las más bonitas de la comunidad.
Hacienda Zorita (Salamanca)
Si buscas un retiro de fin de semana y olvidarte de todo durante unos días al calor de la chimenea, Hacienda Zorita es tu sitio. El complejo, ubicado en el municipio de Valverdón, en la provincia de Salamanca, ofrece tratamientos de spa y relajación en un molino de agua datado en el año 780, además de recorridos enológicos y menús degustación que combinarán con el mejor maridaje. Pero si solo estás de pasada por la zona, es imprescindible visitar el complejo, su cafetería o restaurante, y pasear por sus jardines llenos de magia.
Sepúlveda (Segovia)
En el enclave del Parque Natural de las Hoces del río Duratón se encuentra Sepúlveda, una localidad segoviana repleta de historia. Nacida en la Edad de Hierro como un castro céltico de la tribu de los arévacos, ha acumulado multitud de historias a lo largo de los años. Sus laderas y edificios de estilo románico, además de las casitas colgadas, son un destino ideal para visitar esta Navidad en Castilla y León.
Sierra de Gredos (Ávila)
Pero si el espíritu aventurero está dentro de ti y lo que buscas son aventuras, puedes recorrer la Sierra de Gredos. En el entorno pasarás por pueblos como Arenas de San Pedro, Mombeltrán (donde no puedes dejar de visitar su castillo), Guisando o Candeleda. Si prefieres el contacto directo con la naturaleza, una de sus rutas más famosas es la subida a la Laguna Grande. Un sendero sencillo, que puede realizarse en un día, pero que en invierno encontrarás cubierto de nieve. Y si se te queda corto, puedes hacer noche en el refugio de la plataforma y, a la mañana siguiente, ascender hasta el pico Almanzor, un camino que ya aumenta la dificultad.
