El supercrucero Wonder of the Seas elige el puerto de Barcelona como uno de sus destinos principales en su lujosa travesía.
Los cruceros más grandes del mundo pertenecen a la denominada clase Oasis según la clasificación de la compañía de cruceros Royal Caribbean. Esta clase de barcos tiene representantes tan lujosos como Oasis of the seas, Allure of the seas, Harmony of the seas y Symphony of the seas.
El Wonder of the Seas.
Hasta este año, el último de ellos era el barco más grande del mundo, con capacidad para 6.680 pasajeros. El quinto buque de esta clase, Wonder of the Seas, se ha convertido en el nuevo buque más grande y ya ha superado su primera prueba de mar en el Golfo de Vizcaya.
Según la empresa, el nuevo transatlántico de lujo tiene 362 metros de largo, 18 cubiertas y 2.867 camarotes para acomodar hasta 6.988 invitados. El Wonder of the Seas estaba programado para viajar en 2021 y convertirse en el primer barco de clase Oasis en Asia Pacífico: China, Japón, Vietnam y Corea del Sur.
Cambio de planes.
Los planes para este año cambiaron ante el cierre de astilleros y puertos a nivel global en todo el mundo, lo que ha retrasado el proceso de construcción y el plan preexistente. El barco comenzará su primera ruta oficial el 4 de marzo de 2022, navegando desde Fort Lauderdale hacia el Caribe.
Y luego, en mayo, no irá a Hong Kong, como estaba previsto, sino a Barcelona. Desde donde tomará un crucero turístico de siete días por el Mediterráneo. El nuevo transatlántico tendrá varias zonas enormes con todo lo necesario para unas vacaciones de lujo.
Suite Neighborhood.
Por ejemplo, una de las áreas llamada Suite Neighborhood, disponible para los huéspedes de Royal Suite Class, tiene piscina, bar, tumbonas y su propio restaurante. Además, a los huéspedes del transatlántico se les promete un área de juegos interactiva para niños e incluso atracciones para toda la familia.
Lo cierto es que los cruceros nunca pasan de moda porque son mágicos, tienen algo especial que los hace muy distintos de las habituales vacaciones en hoteles, de más o menos estrellas en tierra firme. El mar nos atrae, es aventura, pasión, romanticismo, y sobre todo una gran experiencia personal que siempre recuerdas y cuentas en las largas sobremesas de infinidad de comidas con familiares o amigos.