La obra de teatro Solitaire, de la compañía A Trompicones, arrancará el ciclo Kupula Bilbao -con la colaboración del Ayuntamiento de Bilbao- en el Teatro Campos el 1 de mayo. Se trata de una programación específica para la Sala Cúpula, que pretende unir la tradición teatral de la Villa con la creación contemporánea local, a la vez que impulsa la labor de autores, directores e intérpretes bilbaínos.
En el drama Solitaire, con texto de Ángel Mirou y bajo la dirección de Bea Insa, Marta Urcelay dará vida a la protagonista de la historia, basada en los años ‘40 en Estados Unidos.
Urcelay representa a una mujer que huye de su vida. Necesita urgentemente tomar el próximo tren, pero no le llega para el billete. Para ganarse lo que le falta, ofrece a los presentes lo que mejor sabe hacer: contar historias. De monstruos que atormentan a niñas; de echadoras de cartas; de sexo en cuartuchos de hotel, de cines de sesión continua y venganzas familiares… Muchas historias, o una sola en realidad: la suya.
Solitaire es la historia de una escritora que nos relata sus vivencias cabalgando entre la ficción y la realidad. Nuestra escritora recuerda a esas femme fatales misteriosas, traidoras y traicionadas, a veces hipócritas y otras depredadoras al más puro estilo de Cisne Negro.
Solitaire comienza con la ruptura de una cuarta pared para hablar directamente al público, haciéndole partícipe y cómplice desde el minuto cero de la representación. Los cambios de personajes por una sola actriz, junto con una rica atmósfera sonora, la iluminación y el atrezzo nos harán volar a los distintos escenarios y situaciones donde transcurre la acción: el bar de una estación, la habitación de los amantes, el cine…
También se caracteriza por una estética con decorados cinematográficos del cine negro. Todo el vestuario y atrezzo es en blanco y negro para transportar al público a ese ambiente de intriga, aventuras, extrañezas, dificultades, suspense…
