El Covid-19 se lleva por delante otra convocatoria anual señalada en el calendario. Esta vez le ha tocado el turno a los actos señalados de Navidad. No va a haber ni desfile del Olentzero ni de los Reyes Magos. Al menos, no como otros años, ya que el Ayuntamiento está pensando en otro plan diferente para no dejar pasar estas jornadas de un modo gris. El edil de Cultura, Jokin Garatea, ha apuntado que «es evidente que en las circunstancias sanitarias que nos encontramos no podemos celebrar actos que congreguen a decenas de personas, pero también está claro que no podemos dejar a nuestros niños sin la ilusión de ver al Olentzero y a sus Majestades». A esto ha añadido que se está trabajando en «alternativas que garanticen una Navidad de ilusión, pero con garantías de seguridad para todos».
Garetea, además, insiste en que «en estos momentos, la prioridad debe ser la seguridad sanitaria de la ciudadanía». Se trata de una decisión del todo previsible teniendo en cuenta que el virus continúa siendo una amenaza importante. Eso sí, desde el Ayuntamiento no quieren cerrar la posibilidad de brindar a los más pequeños un entorno ilusionante, pero si se hace, será algo muy diferente a lo que se está acostumbrado: sin multitudes.