Alba Martín
Deabru Beltzak cumple 25 años y lo celebra ofreciendo ocho actuaciones en Bizkaia. Garbitxu, uno de los miembros, recuerda con cariño el nacimiento del grupo en el que se unieron “amigos teatreros de distintas compañías de Euskadi” para hacer “teatro para gente adulta”. Tal era su trabajo que, en el periodo de 2004 a 2007, la compañía dio “un salto importante al panorama internacional».
¿Cómo nace Deabru Beltzak?
El proyecto nace de una cuadrilla de amigos teatreros de distintas compañías de Euskadi. Nos juntamos y hablando nos dimos cuenta de que faltaba teatro para gente de nuestra edad, adulta, por aquel entonces veinteañera. En aquella época estaba de moda un grupo de rock radical vasco, Negu Gorriak, nos inspiramos en su fundador, Fermín Muguruza, e hicimos un títere de él muy moderno. Así creamos el primer espectáculo: Kontzertu Beltza.
¿Cómo recuerdas las primeras actuaciones?
Éramos muy jóvenes y estábamos muy ilusionados y con ganas de tirar para adelante. Tras las primeras actuaciones vimos que podíamos dedicarnos a Deabru Beltzak para crear una nueva compañía.
Así que el público acogió bien el espectáculo…
¡Y tanto que sí! Llegó un momento que teníamos más trabajo con ese primer espectáculo de Deabru Beltzak que con nuestras respectivas compañías.
En estos 25 años habéis vivido momentos increíbles. ¿Con cuál te quedas?
Me quedo con muchos, especialmente el periodo de los años 2004 – 2007. Allí dimos un salto importante al panorama internacional: Montreal, la Polinesia Francesa, Venezuela… Fueron años muy intensos, de más de 125 actuaciones en cada uno de ellos. Prácticamente solo teníamos un día de descanso entre actuación y actuación. Era agotador, pero estábamos muy ilusionados y sabíamos que estábamos haciendo algo bien para que el mundo se interesara por nosotros.
Ahora están programadas ocho actuaciones por diferentes comarcas de Bizkaia. ¿Qué se va a encontrar el público?
Va a ver una versión de Su Danborrak, uno de los primeros grandes éxitos de la compañía, que lo hemos adaptado en esta colaboración con la Diputación Foral de Bizkaia, que se lo quiero agradecer de todo corazón. Entre la Diputación y nosotros hemos elegido unos pueblos pequeñitos de Bizkaia, uno de cada comarca, para representar en media hora una versión reducida de este espectáculo.