Muy cerca del Teatro Arriaga y justo al día siguiente de que albergara la exitosa gala de los Premios Max, se entregaron los primeros premios Urregin al teatro vasco en el restaurante del mismo nombre que comanda el reconocido cocinero Yoseba Egaña e inaugurado en julio en la calle Nueva, 4 del Casco Viejo, en un acto presentado por Verónica Bretes, con asistencia del alcalde Juan Mari Aburto, la diputada de cultura Lorea Bilbao, el concejal Xabier Otxandiano, Calixto Bieito, Ignacio Malaina, Olatz Gamboa, Felipe Loza y Borja Elorza y Jon Marín como organizadores. El propio Teatro Arriaga fue protagonista de nuevo al recibir el premio a la mejor producción por el «Viaje a ninguna parte», dirigida por Ramón Barea, obra que cuenta por éxitos sus representaciones y con una gran acogida en dos semanas que se les quedaron cortas en Madrid. La obra de Fernando Fernán Gómez es un homenaje al teatro y a todos los componentes de las pequeñas compañías que iban de bolos de pueblo en pueblo. El reconocimiento se ve reforzado por el hecho de que otros dos premiados forman parte del elenco de esa obra, como son Mikel Losada como mejor actor e Itziar Lazkano, premio a la trayectoria por sus 41 años de profesión sobre las tablas, que ha compaginado con su participación en televisión, series y cine. El jurado, compuesto por David Barbero, Arturo Trueba, Sandra Atutxa, Isidro Elezgarai, María Díez y Maitane Zalduegi, decidió también elegir como mejor actriz a la polifacética Gurutze Beitia, por su interpretación en El dilema del jamón. La Fundición, con Luque Tagua y Laura Etxebarria, se hizo acreedora al trofeo por su labor en el mundo de la danza contemporánea y la organización del festival Dantzaldia.