Montijazz Vendimia cierra su primer fin de semana por todo lo alto con Iván Melón Lewis como principal atractivo del festival. El pianista cubano protagonizó una velada en la que la música, el vino y el frescor del final del verano fueron los protagonistas. El jazz no se habría escuchado con el mismo encanto sin Bodegas Alvear, que un año más acogió el evento ofreciendo algunos de sus vinos con D.O. Montilla Moriles como el fino C.B., el 3 Miradas o su Vermouth artesano.
Tras agotar las entradas del sábado, Iván Melón Lewis, junto al contrabajista Yandi Martínez y al batería Alain Ladrón de Guevara, no defraudaron al público. El jazz, los ritmos cubanos y las anécdotas del músico cautivaron tanto a aficionados del jazz como a aquellos que acudían a un concierto del género por primera vez. Unas horas antes, Belén Martín era la protagonista del escenario. La joven saxofonista madrileña repasó los temas de su primer proyecto influenciado por los pioneros del jazz flamenco nacional.
Durante la noche del viernes, el flamenco también sonó en Montijazz de la mano de Enriquito Rodríguez, trompetista manchego que junto a una gran banda de músicos como Bandolero, Juanfe Pérez o Paco Soto, rindieron homenaje al legado de Camarón. De la inauguración del festival se encargó Castillo Kazaki, un cuarteto de jóvenes valencianos liderados por el pianista alemán Felix Schneider-Restschikow, que deleitaron a los asistentes con jazz contemporáneo fusionado por momentos con músicas del mediterráneo y folclore de los países de Europa del Este.
El Montijazz Vendimia seguirá su curso el próximo fin de semana con la música swing como protagonista. Habrá talleres de baile el sábado 16 de septiembre y una actuación de la banda Troupers Swing Band, que cerrará las dos semanas de jazz en Montilla dejándonos a la espera de volver el año que viene.
