A tan solo 20 minutos al sur de Córdoba capital, Montilla es un destino que combina su legado vinícola con paisajes naturales, patrimonio histórico y tradiciones vibrantes. Este rincón de la Campiña cordobesa invita a descubrir sus bodegas, explorar su entorno rural y sumergirse en sus festividades, ofreciendo una experiencia única para quienes buscan cultura y encanto en pleno corazón de Andalucía.
Descubre Montilla
Tierra de vinos
Montilla, reconocida mundialmente por la calidad de sus vinos, está rodeada de extensos viñedos y olivares. Las bodegas y lagares de la Denominación de Origen Montilla-Moriles abren sus puertas durante todo el año para compartir su rica cultura vinícola. Aquí, los visitantes pueden recorrer viñedos, conocer el proceso de elaboración del vino y degustar los exquisitos caldos que definen a esta tierra.
Escapadas en la naturaleza
La Sierra de Montilla es un lugar ideal para los amantes de la naturaleza. Ya sea caminando, en bicicleta o a caballo, este entorno ofrece paisajes únicos como Piedra Luenga, una majestuosa formación rocosa que domina el horizonte, y el mirador del Cerro Don Juan, desde donde se disfrutan impresionantes vistas panorámicas de la provincia. En este paraje, los visitantes pueden descubrir la flora y fauna autóctona que caracteriza a la región.
Patrimonio de Montilla
Montilla cuenta con un rico legado cultural y monumental que se refleja en cada rincón de la localidad. La Ruta Vitis Dei recorre los lugares vinculados a San Juan de Ávila, uno de los personajes más influyentes en la historia del municipio.
El centro histórico alberga joyas como el Museo Garnelo, situado en una elegante casa-palacio. Este museo conserva las obras del célebre pintor José Garnelo y cuenta con una colección de treinta mil volúmenes que convierten a Montilla en un referente intelectual. Además, la influencia de artistas y escritores como el Inca Garcilaso de la Vega, Cervantes y Martín de Roa ha dejado una huella imborrable en su historia.
Fiestas durante todo el año
Las celebraciones son parte esencial de la vida en Montilla. Durante mayo, la Fiesta de la Cruz llena las calles de flores y colores, mientras que en julio, la Feria de El Santo honra al patrón local, San Francisco Solano, con actividades y espectáculos. En septiembre, la Fiesta de la Vendimia celebra la riqueza vinícola de la región, permitiendo a locales y visitantes rendir homenaje a su producto más emblemático: el vino.
Montilla es un destino que combina su alma vinícola con paisajes naturales, un patrimonio único y tradiciones vivas. Una invitación a disfrutar de lo mejor de Andalucía en cada visita.