El popular cantante español Dani Martín, confiesa que visita asiduamente al psiquiatra
Dani Martín o Daniel Martin García, nació en Madrid el 19 de febrero de 1977, es cantante y actor. Conocido por ser el vocalista del grupo ‘El Canto del Loco’ junto con David Otero, sus tres álbumes ocuparon los primeros puestos de las listas de música.
En 2010, la combinación se disolvió, y Dani Martin comenzó una carrera en solitario. A pesar de su gran éxito, su vida no ha sido emocionalmente nada fácil. El propio artista compartía recientemente esta confesión en su Instagram y Twitter, sorprendiendo a sus legiones de fans:
«Estaba en la playa, pero hoy he cogido un avión. Hacía mucho que no me subía a uno, sobre todo para ir a un lugar maravilloso: el lugar donde en estos momentos de mi vida me siento mejor, más yo, más tranquilo, más feliz…», comienza diciendo el artista.
«Es un lugar donde me encanta hablar y donde me abro en canal. Es silencioso, cómodo, a veces paso calor, me emociono, conecto con mi infancia, con mi tristeza, con mis carencias, mis errores: a día de hoy es mi paraíso. Merece la pena encontrar lugares donde uno se siente que está trabajando y aprendiendo, tengo mucho que aprender de mí aún, así que seguiré cogiendo aviones para ir a ese puto paraíso del que os hablo…», continúa Martín.
Estaba en la playa, pero hoy he cogido un avión. Hacía mucho que no me subía a uno, sobre todo para ir a un lugar maravilloso: el lugar donde en estos momentos de mi vida me siento mejor, más yo, más tranquilo, más feliz. (Abro hilo): pic.twitter.com/3kBd2yY7aF
— Dani Martín (@_danielmartin_) June 11, 2021
Un gimnasio para la cabeza
«Se llama psiquiatra. Es un gimnasio donde la cabeza y las emociones se equilibran, se deshacen nudos, conoces de dónde vienen muchas cosas. Donde aprendes a ser quien eres o, al menos, lo intentas. Donde aceptas, donde asumes, donde soy feliz…», asegura Dani.
«Yo voy al psiquiatra, tal vez pueda servirle a alguien. No me considero ni referente, ni alguien que intente influenciar ni contar qué debe hacer cada uno en su vida, ni historias de esas. Tampoco me he comido a Buda, ni he dejado de ser el ser errante que soy. Tampoco tengo ninguna enfermedad mental diagnosticada, ni busco apoyo con este texto, sólo soy alguien que hoy vomita esto aquí porque así me ha salido al subirme al avión…».
Sin duda una confesión valiente que dice mucho del artista y que puede ser de gran apoyo para otras personas que también buscan ayuda profesional cuando la necesitan.