Seguimos de luto estas Navidades. Después de conocer ayer el fallecimiento del cantante George Michael, hoy, martes 27 de diciembre se confirma la triste noticia: ha muerto Carrie Fisher. La intérprete de la Princesa Leia de Star Wars no ha podido superar el infarto sufrido el pasado viernes.
Carrie Fisher ha muerto a los 60 años en Los Ángeles
Carrie Fisher se encontraba hospitalizada en Los Ángeles después de haber sufrido un ataque cardiaco bordo del vuelo de United Airlines 935 que viajaba de Londres a la ciudad californiana. La actriz tuvo que recibir reanimación cardiopulmonar y fue trasladada al hospital UCLA , donde ingresó en condición crítica. Allí, los médicos consiguieron estabilizarla después de 15 minutos muy críticos. Los esfuerzos médicos no han conseguido mantener con vida a la popular intérprete que nos ha dejado a la edad de 60 años.
Carrie Fisher tenía en sus genes el talento artístico. Hija del cantante Eddie Fisher y de la actriz Debbie Reynolds (‘Cantando bajo la lluvia’), pronto encaminó sus pasos hacía la interpretación, debutando con apenas 20 años en ‘Shampoo’ junto a Warren Beatty.
La Princesa Leia, su gran papel
El papel que fagocitó su carrera y por el que es mundialmente conocida es de la Princesia Leia en Star Wars. Fisher participó en 4 películas de la saga (‘La guerra de las galaxias’ (1977), ‘El Imperio contraataca’ (1980), ‘El retorno del Jedi’ (1983) y ‘El Despertar de la Fuerza’).
El alcohol y las drogas dinamitaron su trayectoría como actriz. Alternando temporadas llenas de producciones de baja calidad con apariciones en películas de culto como ‘The Blues Brothers’ o la oscarizada ‘Hannah y sus hermanas’. Pese a sus adicciones, Carrie Fisher logró encauzar una destacada carrera literaria, en la que destaca con merecimiento su novela ‘Postales desde el filo’, adaptada al cine por Mike Nichols en la película homónima, interpretada por Shirley MacLaine.
Carrie Fisher ha muerto demasiado pronto, pero su icónica interpretación de la mítica Princesa Leia nos acompañará toda nuestra vida. Gracias, Carrie.