A través del olfato podemos deleitarnos o sentir repugnancia. El olor está conectado con las emociones, formando parte de todo lo que hemos vivido. Posee su propia memoria. Los olores desagradables a sudor, tabaco o suciedad perjudican el día a día de muchas personas. El creciente empeño por erradicarlos está haciendo que la industria de las fragancias se desarrolle cada vez más. ¿Cuáles son las técnicas de marketing desplegadas para que consumamos más productos? ¿Cuáles son los riesgos para nuestra salud? Este sábado 14 de noviembre, La noche temática en La 2 nos sumerge en el universo de los olores.
El imperio del olfato, La noche temática en La 2
Comenzamos la emisión con un documental de nacionalidad canadiense del año 2014. Con una duración de 52 minutos, está dirigido por Kim Nguyen y producido por Lowik Media.
El olfato está estrechamente ligado a muchos aspectos de nuestra vida. Molly sufrió un accidente y perdió el sentido del olfato y con ello una forma de sentir la vida. Cuando nos dan a luz, lo primero que hacemos es seguir el rastro de la leche materna. Es el olfato el que nos lleva hasta la punta de su pezón. El placer de los aromas está intrínsecamente relacionado con el instinto de supervivencia, que, a su vez, depende de ese disfrute que conlleva aspirar las fragancias, pues no hay mejor manera de saber lo que va a ser bueno o no para nosotros. Cuando lloramos sin saber muy bien por qué lo hacemos, vivimos un tipo de experiencia primigenia. Y esto es así porque la zona del cerebro en la que se procesan los olores está estrechamente vinculada con esa otra en la que se desenvuelven las emociones.
La guerra de los olores
Terminamos la emisión con un documental francés del año 2015 de 52 minutos. Está dirigido por Elisa Hélain y producido por Upside Télévision.
Los malos olores están presentes casi diariamente en nuestras vidas. Los fabricantes han inventado cientos de soluciones para oler bien en cualquier situación: desodorantes, antitranspirantes, ambientadores, “destruye olores” o sprays purificadores. Es un sector floreciente y polémico por los posibles riesgos para la salud de algunos productos.
La fórmula del desodorante es muy sencilla. Se compone de alcohol. El alcohol desempeña un papel muy importante como bactericida que, asociado a un activo derivado de zinc, es muy eficaz contra las bacterias. Los desodorantes son eficaces contra el mal olor pero no pueden hacer nada frente a otro problema: las manchas de sudor. Todo cambió en los años 90 gracias a un producto revolucionario: los antitranspirantes. El secreto de su composición son las sales de aluminio. Un ingrediente de propiedades sorprendentes pero que lleva unos años preocupando por los riesgos que podría suponer para la salud, especialmente su influencia en el cáncer de mama.