El príncipe constante es una «comedia famosa» (en realidad, tragedia) en tres jornadas (o actos) y en verso del dramaturgo español Pedro Calderón de la Barca, escrita en 1629 y editada por primera vez en 1636. En una edición suelta lleva el título de El príncipe constante y mártir de Portugal.
La obra recrea la historia real del infante Fernando de Portugal, quien en el siglo XV se aventuró en campañas en territorio marroquí en nombre de la corona portuguesa. En batalla contra las huestes del rey de Fez, los hombres de Fernando toman prisionero al guerrero Muley Hasán, de quien está secretamente enamorada Fénix, la hija del monarca. Movido por un sentimiento de piedad, el portugués libera a Muley. En último término el propio Fernando cae prisionero del rey marroquí, que pretende intercambiarlo por la ciudad de Ceuta, en manos portuguesas. Pese a que en Lisboa aceptan la propuesta, Fernando se niega al trato porque supondría perder almas para la fe verdadera. Finalmente muere en cautiverio, presa del hambre, la tortura y todo tipo de privaciones y miserias, pese a la victoria final de las tropas lusas, transformándose en un mártir.
La obra es un drama sobre el libre albedrío humano, dividido entre los requisitos éticos y la doctrina de la salvación. El personaje principal se condena conscientemente a la esclavitud, a la privación de privilegios y, finalmente, a la muerte, en nombre de la fe cristiana con la que se le identifica. En ello refleja una concepción neoestoica del cristianismo. La acción es doble: exterior e interior por parte del protagonista, quien se debate en grandes dudas existenciales.
El 9 de Noviembre en Teatro Bernal de El Palmar (Murcia).