Arturo y Clementina son dos tortugas enamoradas que deciden compartir su vida. Clementina es alegre, vivaz y soñadora y Arturo carga sobre su caparazón la responsabilidad de mantenerla y ofrecerle todo lo que él considera valioso. Pero los criterios de ambos son muy diferentes. Mientras Clementina quiere sentir el arte y la vida creando, Arturo solo valora la cultura ya consagrada y se ríe de la ingenuidad de su compañera al querer desarrollar distintas actividades artísticas.