Camen, es el símbolo de la mujer que apasiona, sublima y embriaga. La mujer perfecta para poder hacer feliz a cualquier hombre y, al mismo tiempo, para llegar a volverlo loco.
La obra se desarrolla en Sevilla y alrededores hacia el año 1830. En una plaza de Sevilla, donde están emplazados el cuartel de los Dragones de Alcalá y una fábrica de cigarros. Un grupo de soldados conversa frente al cuartel. Micaela llega hasta ellos preguntando por el brigadier Don José. En ese momento, no está, pero es informada de que llegará pronto; con el cambio de guardia. Los soldados tratan de retenerla pero la tímida joven se va señalando que volverá pronto. Precedidos por un grupo de niños llegan los soldados al relevo de la guardia. Entre ellos llega Don José. De la fábrica de cigarros salen las gitanas obreras coqueteando con los hombres presentes. Estos preguntan por Carmen que, de inmediato, sale. La gitana presta especial atención a Don José y le arroja una flor como muestra de admiración. Don José queda solo y recibe la visita de Micaela, quien trae una carta de su madre, a quien el soldado recuerda con nostalgia. Micaela se va, Don José comienza a leer la carta pero es interrumpido por una riña entre las gitanas de la fabrica de cigarros. El Capitán Zúñiga ordena a Don José que averigüe el por qué de la riña: Carmen ha herido a una compañera y es detenida por el brigadier. En actitud desafiante, Carmen se burla de todos y mientras don José se apresta a conducirla a prisión, ella lo engatusa invitándole a divertirse y a reencontrarse en la taberna de Lilas Pastia. Con la expectativa de esa cita, Don José deja escapar a Carmen y paga con prisión el incumplimiento del deber. Carmen y sus amigas Frasquita y Mercedes cantan y bailan una canción gitana. Hasta el lugar llega el torero Escamillo acompañado por un grupo de admiradores a quienes les cuenta sus aventuras en el ruedo. Escamillo repara en la belleza de Carmen e intenta abordarla, pero la gitana no responde a sus galanteos. Hasta la taberna llegan también los contrabandistas Remendado y Dancario, para pedir a Carmen y a sus amigas que los acompañen en su próxima faena. Carmen se niega y dice que espera visita. En ese momento se oye venir a Don José que ya ha salido de prisión. La gitana está feliz de verlo y baila con él. A lo lejos se escucha la retreta militar y el soldado debe partir al cuartel. Carmen se enfurece y Don José tiene que imponer a la fuerza que escuche sus declaraciones de amor. Carmen le responde que la única manera de probarle su amor es uniéndose a ella y sus amigos en una expedición por las montañas. En ese momento irrumpe Zúñiga quien ha venido en busca de Carmen. Don José y su superior se pelean. Los gitanos consiguen desarmar a Zúñiga y Don José escapa y se une a ellos. En un lugar de las montañas, los gitanos y contrabandistas descansan en un recodo. Carmen comienza a aburrirse del amor de Don José quien no se adapta a esa vida de libertad. Se acerca a Mercedes y Frasquita que están leyendo su futuro en las cartas y Carmen decide hacer lo mismo. Una y otra vez, las cartas le dan la misma respuesta: la muerte. El grupo sale para intentar pasar el contrabando y Don José se queda en la retaguardia. Sin ser vista, Micaela ha llegado hasta ese lejano rincón en busca de Don José. Ante un disparo que lanza éste, la joven se oculta. El disparo iba dirigido a un extraño que se acerca y resulta ser Escamillo. Sin conocer la identidad de Don José, el torero cuenta que viene en busca de Carmen. Don José le reta a duelo y Carmen aparece junto a las gitanas para separarlos, Antes de despedirse, Escamillo invita a todos a las corridas de toros de Sevilla. El Remendado descubre a Micaela y la trae ante el grupo. La muchacha dice a Don José que su madre está agonizando y lo insta a partir con ella, para felicidad de Carmen. Don José parte, después de amenazar a Carmen diciéndole que pronto volverá. La muchedumbre se agolpa ante los preparativos de la próxima corrida. En medio de aclamaciones y vítores aparece Escamillo junto a Carmen, ahora su amante, elegantemente vestida. Después de reiterarle su amor, Escamillo deja a Carmen y parte al ruedo. Mercedes y Frasquita recomiendan a Carmen que se aleje pues Don José está entre la multitud. Sin embargo, ésta decide enfrentarlo. Todos los ruegos y posteriores amenazas de Don José hacia Carmen resultan vanos. La gitana repite una y otra vez que ahora ama al torero. Se escucha cómo la multitud aclama a Escamillo y Carmen intenta entrar a la plaza, pero Don José, presa de la ira y los celos, la mata a puñaladas. Después, sollozando, la invoca desesperadamente, confiesa su crimen, y se deja arrestar.
5 de noviembre. 19 h y 21 h.
6 de noviembre. 19 h.
Entradas: Ataquilla
