REPARTO: Carlos Lorenzo.
LA OBRA: Sucedió una madrugada de mayo de 1956: Montgomery Clift –que por aquel entonces le disputaba a Marlon Brando el primer puesto en el Olimpo de Hollywood- yacía con el rostro empotrado en el tablero de su Chevrolet. Acababa de tener un accidente mientras regresaba de una fiesta en la mansión de Liz Taylor. Sobrevivió (se sobrevivió) diez años y filmó una decena más de películas, algunas tan memorables como Vencedores y vencidos o Vidas rebeldes. Desde aquella madrugada, trató de no enloquecer mientras asistía al feroz combate que libraba su alma contra la máscara de galán hecha pedazos. Un combate salpicado de alcohol y cirugías, de amantes perversos y de pastillas, pero del que siempre mantuvo a salvo el inmenso respeto y devoción hacia su oficio de actor. Cliff (acantilado) es un texto teatral que habla de eso: de la capacidad salvífica de la creación, de la lucha por la dignidad y por la esperanza, del oficio mismo del actor.
Lugar: Sala Experimental del Teatro Zorrilla
Plaza Mayor 9