Descubriendo «SUTONDOAN: Maribel y la extraña familia»
En el corazón de la escena teatral, surgió una obra que capturó la esencia de la comedia y el drama a través de una narrativa fascinante: «SUTONDOAN: Maribel y la extraña familia». Dirigida por el aclamado Gerardo Vera y basada en el ingenio de Miguel Mihura, esta producción teatral revive con frescura y originalidad desde su estreno en 1959. La historia se centra en Maribel, una mujer con un pasado complicado, que se encuentra inmersa en las dinámicas de una familia poco convencional en la calle Hortaleza de Madrid.
¿Quién es Maribel?
Maribel, interpretada con maestría por Lucía Quintana, es el personaje central de esta historia. Su vida da un giro inesperado cuando decide mudarse a una casa habitada por dos ancianas encantadoras pero peculiarmente insistentes en casarla con su hijo Marcelino. Maribel, cuyo pasado como prostituta se revela sutilmente, se ve entonces envuelta en una trama de redención, amor y búsqueda de un nuevo comienzo.
La Extraña Familia
La «extraña familia» está compuesta por personajes que, a primera vista, podrían parecer salidos de una comedia clásica, pero que esconden profundas capas de complejidad y humanidad. Marcelino, el hijo en busca de esposa para escapar de sus problemas familiares, es interpretado por Markos Marín. Junto a él, el reparto incluye a Ana María Vidal, Sonsoles Benedicto, Lidia Otón, Javier Lara, Chiqui Fernández, Macarena Sanz y Abel Vitón, quienes dan vida a esta insólita familia con gran destreza y emotividad.
La coreografía y la dirección artística
Un elemento que destaca en esta producción es la coreografía realizada por Chevi Muraday, cuyo trabajo aporta una dimensión adicional al desarrollo de los personajes y la narrativa. La dirección de Gerardo Vera, por otro lado, consigue un equilibrio perfecto entre los momentos de humor y aquellos de tensión dramática, manteniendo al público enganchado de principio a fin.
¿Por qué ver «SUTONDOAN: Maribel y la extraña familia»?
Esta obra no solo es un entretenido viaje a través de las vicisitudes de Maribel y su convivencia con una familia fuera de lo común; es también una reflexión sobre la búsqueda de la felicidad, la aceptación y el poder transformador del amor. La narrativa, rica en matices y giros inesperados, promete mantener a los espectadores al borde de sus asientos, mientras que las actuaciones profundamente humanas y la dirección impecable garantizan una experiencia teatral memorable.
Conclusiones
«SUTONDOAN: Maribel y la extraña familia» es una obra que desafía las expectativas, mezclando la comedia y el drama con una habilidad excepcional. A través de personajes inolvidables y situaciones que oscilan entre lo absurdo y lo profundamente emotivo, la obra ofrece una ventana a las complejidades del alma humana. Para aquellos que buscan un espectáculo que combine humor, drama y una dirección artística de primera, esta producción emerge como una opción destacada en el panorama teatral actual.
Así, esta obra no solo cumple con entretener, sino que también invita a la reflexión sobre temas universales, haciéndola relevante para cualquier espectador en busca de una experiencia teatral rica y conmovedora.
