La Fundación Caja Rioja celebra el 8 de octubre la Marcha Hoyos de Iregua, una actividad tradicional que llena de alegría a todos los amantes del senderismo. Esta marcha, que discurre íntegramente por el hermoso Parque Natural Sierra de Cebollera, se ha convertido en una cita ineludible para los amantes de la naturaleza y el deporte al aire libre.
Con un recorrido de 30,5 kilómetros, la Marcha Hoyos de Iregua es un desafío que pone a prueba la resistencia y la determinación de los participantes. A lo largo del camino, los senderistas podrán disfrutar de la exuberante belleza de la Sierra de Cebollera, con sus majestuosos bosques, sus ríos cristalinos y sus impresionantes vistas panorámicas.
Pero esta marcha no sería posible sin el apoyo del Gobierno de La Rioja y la colaboración de CaixaBank. Gracias a su patrocinio, la Marcha Hoyos de Iregua puede ofrecer a los participantes una experiencia inolvidable, llena de diversión y emoción. Este año, además, la marcha se enorgullece de formar parte de la Liga Ibérica de Senderismo, lo que la convierte en un evento aún más especial.
La Marcha Hoyos de Iregua es mucho más que una simple competición, es una oportunidad para conectar con la naturaleza, respirar aire puro y disfrutar de momentos de paz y tranquilidad. A lo largo del recorrido, los participantes podrán contemplar la flora y la fauna autóctona de la Sierra de Cebollera, sumergiéndose en un entorno natural único y mágico. Pero no todo es caminar, la Marcha Hoyos de Iregua también es una ocasión perfecta para disfrutar de la compañía de otros senderistas y compartir experiencias. Durante el recorrido, los participantes podrán intercambiar historias y consejos, creando vínculos y amistades que durarán mucho más allá de la marcha.
Y como no podía ser de otra manera, la Marcha Hoyos de Iregua cuenta con paradas estratégicas en las que los participantes podrán reponer fuerzas y deleitarse con la deliciosa gastronomía de la región. Productos locales como los embutidos, los quesos y el vino de La Rioja estarán presentes en estas paradas, ofreciendo un auténtico festín para los sentidos.