Se podrán ver desde imágenes rodadas por Méliès y también bustos trucados utilizados en el teatro Robert Houdini, un cinematógrafo con proyector de los hermanos Lumière, una maqueta del estudio acristalado de Méliès en Montreuil. También un arlequín autómata de finales del siglo XIX, que luego recuperó Scorsese para La invención de Hugo.
Hasta el 8 de mayo en CaixaFórum Zaragoza.