La artista londinense Hannah Collins ha sido reconocida por la compleja dimensión documental de sus fotografías, que a menudo se presentan en grandes formatos o en secuencias que reúnen varias imágenes de un mismo lugar. El proyecto que Collins presenta en la Fundació Antoni Tàpies bajo el título Escribiré una canción y la cantaré en un teatro rodeada por el aire de la noche pone el foco en la figura del arquitecto egipcio Hassan Fathy. En estas fotografías, ya sea montadas en una secuencia y proyectadas como un film, ya sea presentadas en grandes formatos, Fathy emerge como el espectro de un legado moderno vernáculo olvidado. A través de la fotografía, las arquitecturas se redimen de la decadencia y la ruina que las amenaza. El trabajo que Collins ha desarrollado alrededor de esta figura podría entenderse como una colaboración que solo es posible mediante la fotografía.