El Museu Picasso presenta una exposición dedicada a la obra de Pablo Picasso conservada por su hermana Lola Ruiz Picasso que a la vez sirve como demostración del cariño que ambos se profesaron a lo largo de sus vidas. Lola fue una de las modelos favoritas del Picasso niño y adolescente; sus primeros retratos datan del año 1894 en La Coruña, y se mantienen en la iconografía del artista hasta 1900.