El dúo Los Pecos dará un concierto en el Coliseum de A Coruña el 5 de abril a las 21 horas con motivo de su nueva gira «Dos voces y una historia».
Los Pecos darán un concierto en A Coruña con motivo de su nueva gira «Dos voces y una historia»
El inesperado retorno de Pecos se ha optado por llamarlo gira de 45.º aniversario, cuando en realidad en el 2025 se cumplirán 47 años desde el debut del dúo que agitó miles de corazones adolescentes a finales de los setenta y principios de los ochenta. Ocurrió con el single Esperanzas (1978) y, después, con el elepé Concierto para adolescentes (1979). Aquel pop romántico y edulcorado interpretado por las voces de los hermanos Francisco Javier y Pedro José Herrero Pozo obtuvo un enorme éxito que derivó en un fenómeno fan mayoritariamente femenino que marcó a toda una generación.
Aquellas chicas que musicaron su adolescencia con canciones como Háblame de ti, Acordes y Si tú los vieras podrán reencontrarse en esta nueva gira del dúo.
Los Pecos forman parte de la historia del pop nacional. Surgieron en un momento en el que la música se preparaba para un cambio. Si en los setenta mandan los cantantes melódicos y los cantautores con pretensiones generalistas, con ellos se creó un canal que miraba al público de 13 a 18 años. Caminarían por él en paralelo al primer Miguel Bosé y Pedro Marín. Frente a ellos, Pecos aportaban la plástica de un dúo de hermanos cuyas cabelleras los definían. Así, popularmente se hablaba del «rubio de los Pecos» para referirse a Javi y «el moreno» para Pedro. No era el único contraste. La voz del primero era la aguda y la del segundo la grave. Ambas se empastaban en frágiles melodías preñadas de sentimentalismo y letras como: «Yo quisiera ser, parte de tu piel / Tono de tu voz, agua de tu ser ».
Su paseo triunfal por las listas de éxitos y escenarios de conciertos resultó muy intenso, pero también muy breve. En 1981 el servicio militar obligatorio se interpuso entre ellos. Primero fue Javi. Después, Pedro. Con dos años de diferencia, cuando quedaron libres de sus obligaciones con el estado ya habían pasado de moda. Sus fanes habían crecido y el ciclón del nuevo pop liderado por Mecano y Olé Olé había cambiado completamente el tablero de juego. En 1984 su disco de reencuentro, Por arte de magia, se estrelló con el desinterés precipitando la disolución del grupo. Después volverían en varias ocasiones generando siempre el mismo efecto: el de volver aquel viejo diario juvenil lleno de corazones atravesados por una flecha. En el 2025 tocará abrirlo de nuevo.