El Museo del Prado reabre sus puertas tras la crisis sanitaria del coronavirus y lo hace con una exposición temporal muy especial llamada Reencuentro. Con esta muestra, la pinacoteca pone punto y final a su cierre mostrando más de 250 obras, las más destacadas de su exposición permanente, y evocando la museografía existente cuando el Prado abrió se puso en marcha por primera vez.
Un espectacular montaje en la Galería Central y salas adyacentes que ofrece un valor añadido a este espacio emblemático, el lugar elegido para su ubicación por sus características arquitectónicas capaces de garantizar el cumplimiento de las recomendaciones de las autoridades sanitarias y procurar un modelo de visita seguro para el público y los empleados.
A pesar de no poder recorrer todas las salas del espacio (solo han reabierto algunas de ellas), a través de esta exposición el visitante puede contemplar las obras más conocidas del museo. Una experiencia única e inédita que cuenta con La Anunciación de Fra Angelico y El Descendimiento de Van der Weyden, los Saturno de Goya y Rubens, Las Meninas y Las Hilanderas de Velázquez, y La familia de Carlos IV y el 2 y el 3 de mayo de Goya, entre otras muchas otras maravillas del arte.
El número de visitantes diarios, en la fase actual, se establece en un tercio de la capacidad de ocupación de sus salas y el recorrido discurre por los espacios más amplios y representativos del museo, para cumplir así mejor las recomendaciones de las autoridades sanitarias y procurar una visita segura a visitantes y empleados.