El brillo y la espada es el título de la primera exposición individual del pintor asturiano Rodrigo Martín en la Galería Lucía Dueñas. Una exposición muy esperada, puesto que debido a la pandemia se retrasó casi un año, pero por fin, las obras de Rodrigo cuelgan de las paredes de la galería.
El brillo y la espada está articulada desde dos puntos diferentes: por un lado, las pinturas creadas dentro del periodo de cuarentena, con una intención de ruptura respecto a sus anteriores trabajos, y por otro lado una selección de piezas realizadas en 2021 que se relacionan directamente con estas no sólo por su carácter formal sino también por su paleta de colores.
Elementos que se repiten y por tanto se destacan como importantes son las formas apuntadas, los rombos y la forma de daga.