El Centro de Arte Contemporáneo de Málaga alberga hasta el 28 de enero ‘Familias mínimas (Rojo, amarillo y azul)’. Una exposición con diez pinturas que exploran el espacio pictórico como asunto de reflexión centrándose en conceptos como el marco, el soporte o los extremos. La pintura del artista sevillano Rubén Guerrero es anti-narrativa, construye arquitecturas imposibles y engaña al ojo mediante trampantojos. Guerrero crea un mundo intuitivo, paralelo al mundo real y tangible donde lo lleno y lo vacío se intercambian. La muestra está comisariada por Fernando Francés.
La muestra que se exhibe en el CAC Málaga en el Espacio Proyectos; tiene unas claras nociones de recapitulación. Esta exposición es una oportunidad para Rubén Guerrero de presentar de forma más clara los motivos y referentes más representativos que han sido una constante en su obra en los últimos años. Estas “Familias” de motivos se pueden aglutinar en varios grupos: por un lado, estructuras pseudo arquitectónicas como S/t (a(b(c))) (2015) o S/t (la medición) (2016); por otro, pliegues como S/t(la mitad de lo que ves) (2016) o Composición con amarillo P.M. (2015) y paramentos, más herméticos y que cierran casi completamente la superficie representada como S/t (línea de área)(2015) o S/t (bucchi trasversale) (2014). De ahí el nombre de la exposición Familias mínimas (Rojo, amarillo y azul).
hasta el 28 de enero.
CAC Málaga. (C/ Alemania s/n). Málaga.
+ info: www.catmalaga.eu