Sábado 21 noviembre 2015 – 20:00 – Sala Sinfónica, entradas: 7 / 13 / 19 / 24 / 29 €
El compositor chino Tan Dun afirma sobre The Tears of Nature: “La naturaleza no solo representa las cuatro estaciones del año, sino que puede hacer referencia a animales que habitan en ella, como leones o tigres, que a su vez pueden adoptar varias formas: belleza, amenaza, amistad o amor. Mi concierto para percusión está dividido en tres movimientos, y cada uno representa un color diferente de la naturaleza: el trueno, la pasión y la energía, todos unidos por el espíritu humano”.
Las anteriores palabras reflejan el amor por la naturaleza de un compositor cuya trayectoria vital ha estado plagada de vicisitudes, desde niño rebelde fascinado por las manifestaciones musicales populares de su pueblo hasta su formación con Toru Takemitsu o su premio Oscar por Tigre y dragón. El concierto está compuesto para el que él llama “mi querido amigo, un verdadero artista de la percusión”, que no es otro que el solista que nos visita, Martin Grubinger, famosísimo y mediático ganador de los premios Leonard Bernstein (2007) y Fundación Würth (2010). Contará con el apoyo del venezolano Diego Matheuz, director principal de La Fenice de Venecia, del que la crítica ha destacado su tremenda energía y la capacidad para transmitirla a la orquesta, algo que se demostrará como muy necesario en la segunda parte de este concierto de abono.
Compuesta entre fechas bastante imprecisas, la Sinfonía n.º 10 de Dmitri Shostakóvich fue estrenada en 1953 por la Orquesta de Leningrado y Yevgeni Mravinski. Su recepción acumuló opiniones a favor y en contra. Su tono general es pesimista y oscuro, pero a la vez está expresado de una forma magistral, en una especie de resumen de todo lo que se asocia con el estilo de Shostakóvich a la hora de componer para gran orquesta. El autor a veces se mostró un poco crítico con la estructura de su propia obra, sobre todo en cuanto a la longitud de algunos pasajes, lo que por supuesto no obsta para que esta sinfonía sea apreciada como una maravillosa creación y esté perfectamente instalada en el repertorio.