Con una estética minimalista y conceptual, mediante una práctica meticulosa, incisiva y a veces obsesiva, las palabras son invitados extraños, y lo performativo es protagonista.
El gesto, el material utilizado, la distancia, la repetición o el tiempo son los actores a través de los cuales se revela el valor de momentos supuestamente anodinos.
Exposición en el Museo Marco de Vigo.
Lugar:
Calle Príncipe 54, Vigo