Una interesante muestra de Javier Morales sobre los psiquiátricos granadinos a mitad del siglo XX, como el Hospital Real de Granada.
La exposición del también nacido en Granada Javier Morales, ‘Lili y saber profano’ muestra la realidad del Hospital Real de Granada, popular hospital psiquiátrico a mediados del siglo XX. Un lugar lleno de misteriosos claroscuros.
El Palacio de los Condes de Gabia, sede de la Diputación de Granada, Cultura de Granada, acoge esta interesante exposición. ‘Lili y el saber profano’ se podrá visitar hasta el 19 de septiembre. Una exposición, como decimos, que retrata la cruda realidad del manicomio en 1955 mediante las cartas de Lili.
Ella fue una mujer que fue encarcelada en el manicomio de Leganés, donde su marido la encerró a la fuerza, sin dejarla ver a sus hijos. Su esposo la llevó contra su voluntad, la metió en un taxi y luego la dejó a su suerte en este complicado lugar.
Allí permaneció cinco o seis años y dio a luz a cinco hijos. En las cartas le rogaba a su esposo que la dejara conocerlos. El artista explicó en la ceremonia de apertura que esta obra tiene como objetivo rendir homenaje a Lili y mostrar el hospital psiquiátrico, como recuerdo de la zona oscura.
Para ello, Morales, dedicado a explorar las emociones entre personas y lugares, la formación de identidades y raíces a través de películas documentales. Examinó y utilizó diferentes archivos fotográficos, audiovisuales, sonoros y de texto, algunos de los cuales generarían polémica.
Hay que señalar que los recursos usados no son propios de la vida de Lili, pero sí que consiguen reproducir el escenario real de ese momento histórico. Por ello, el artista ofrece distintas voces sobre este tema, y trabajó en su obra anterior ‘Legajo y hoja de contacto’, que fue presentada en 2018 en la Universidad de Granada, en su Facultad de Bellas Artes, para el Festival de Arte Contemporáneo.
Nueva propuesta.
La Diputada de Cultura Fátima Gómez señaló que esta nueva obra propone una apertura a través de un muro levantado en otra época. Haciendo de la mirada un sonido y del sonido una nueva mirada sobria.
El carácter íntimo de una letra se convierte en testimonio de la historia, y el primer sentido de la imagen abre la diversificación de su resonancia, enfatizó la representante pública.
Por lo tanto, la exposición reúne diferentes visiones sobre Lili y las voces silenciosas de muchos otros. Además propone un espacio conmemorativo sobre el trauma histórico. Así como de las percepciones sociales de la salud mental, los modelos de resistencia y las fuentes de conocimiento secular.