Para ofrecer un servicio completo, el hotel cuenta con cafetería y un pequeño restaurante, el Salón Ana María. Tienen una amplia variedad de platos combinados y unos exquisitos helados caseros.
Su especialidad son las tostas, todas con nombre propio:
Tosta La Catedral: revuelto de setas, jamón y pimientos rojos
Tosta La Capilla de Santa Ana: espinacas con mozarella fresca
Tosta La Capilla de Santa Tecla: solomillo ibérico con queso de cabra y cebolla caramelizada
Tosta El Claustro: salmón marinado con queso
Tosta El Papamoscas: jamón serrano con pan tumaca