La Taberna de Las Beatillas es una de las más antiguas de Córdoba y está enclavada en uno de los rincones con mayor encanto del casco histórico: el popular barrio de San Agustín, que conserva las formas más originales y típicas andaluzas: las calles estrechas, empedradas, con sus casas encaladas y rematadas en albero.
A principios de siglo la taberna era una piconería, pasó a ser bodega y más tarde, allá por los años 40 una taberna, tal y como se conoce hoy en día.
Es conocida como Las Beatillas por la plaza en la que se encuentra ubicada. Antiguamente, había allí un beaterio, donde las beatas vivían en comunidad siguiendo estrictas normas. Cuentan las leyendas que una de ellas era la encargada de realizar los recados y por ser de estatura pequeña, la conocían como «la beatilla».
Por su ubicación es paso obligado en las celebraciones religiosas como la Semana Santa y fiestas populares como Los Patios y Las Cruces del Mayo Cordobés.
Desde 1989 es regentada por Antonio Sánchez Salamanca que ha sabido preservar la singularidad del ambiente que caracteriza a las tabernas andaluzas.