La cara b del cuento
En pleno frenesí revisionista de cuentos infantiles de toda la vida explorados en su vertiente más sombría y oscura, Peter Stromberg se suma a la fiesta indagando en el pasado de la mala más mala de todas las malas Disney, y en el presente, pero desde otro ángulo, desmontando "La bella durmiente" para reconstruirla a su antojo, con el aval de una mirada más adulta (no vedada, ojo, para el público infantil) que como incursiones recientes en el subgénero ("Blancanieves y la leyenda del cazador, "Hansel y Gretel" y sucedáneos) oscila en torno a dos principios fundamentales: reescritura del cuento clásico en un entorno visual de cine épico-fantástico, en plan Tolkien o C.S. Lewis y apuesta por enfatizar el lado oscuro del relato, la entidad e identidad de las fuerzas del mal que se deslizan detrás de las hazañas del héroe-heroína. Y como en aquellas, Stromberg se olvida del esqueleto dramático para recrearse en las deslumbrantes florituras visuales de un espectáculo muy de ahora, todo fachada, hueco por dentro. Stromberg es un diseñador de producción, técnico de efectos visuales antes que director, y su procedencia se nota a la legua. En efecto "Maléfica" entra por los ojos, apabullan sus trucos digitales, la cuidadísima arquitectura de sus paisajes de cuento, el suntuoso desfile de modelos, e incluso, apurando, el concepto de reinterpretación en sí, mucho más jugoso y prometedor que el de otras películas recientes del mismo palo. Pero con eso no basta, ni de lejos, y "Maléfica" sería carne de olvido instantáneo si no fuera por la magnética y arrolladora presencia de su actriz protagonista. Angelina Jolie se gusta en la piel de la arpía resentida que una vez no lo fue con un derroche de carisma, un vendaval de presencia escénica que eclipsa todo y todos a su alrededor. No hay personajes secundarios, y las subtramas son de azucarillo, pero da igual, la cinta está diseñada para que la llene Angelina, y vaya si lo hace. Exprimiendo todos los matices posibles del personaje, y unos cuantos más, la esposa de Brad Pitt propone una de sus mejores prestaciones ante las cámaras de siempre y, no exageramos, una de las interpretaciones femeninas del año. Lástima que el atrezo no acompañe.
Lo mejor:
Una deslumbrante Angelina Jolie
Lo peor:
Bajo el derroche de efectos visuales no hay nada
Fecha de publicación: 04/06/2014