Impulsadas por el gran número de seguidores que lograron con su webserie Estoy rara, Paloma Jiménez y Ángela Conde decidieron llevar la fórmula al teatro. Ahora, presentan un espectáculo de sketches en el que recurren al humor negro y a la ironía para abordar temas relacionados con la igualdad, el empoderamiento o la incapacidad del ser humano para alcanzar la felicidad.