Cuando llega el fin de semana apetece escapar de la rutina y conocer nuevos lugares. En este sentido, la provincia de Pontevedra tiene multitud de castillos, fortalezas, murallas y torres, testigos de mil batallas y reflejo de la historia de Galicia, que destacan por su belleza y están situados en entornos idílicos.
Descubre el patrimonio fortificado de las Rías Baixas, una visita a los castillos de la provincia que deberías conocer
Presentamos una selección de algunos de los castillos, fortalezas y torreones más importantes de la provincia que debes conocer:
Paisaje e historia se entremezclan en perfecta armonía en la provincia de Pontevedra a través de su rico patrimonio fortificado
Fortaleza del Castro- Vigo
El monte de O Castro es el punto de origen de la ciudad de Vigo, el lugar donde los primeros pobladores se asentaron. Así podemos encontrar restos castrenses datados del siglo II y III a.C. Hoy en día aún se conservan unas 45 construcciones pétreas en la ladera derecha del monte.
En la Edad Media se construyó el Castillo de O Castro y sus jardines datados del S. XVII, el cuál se erige al mismo tiempo que el castillo de San Sebastián y la fortaleza que unía ambos. La fortaleza de O Castro estaba formada por tres recintos amurallados. En la actualidad sólo se conserva el primer recinto y parte del segundo; el tercero, que sería la muralla de la ciudad, desapareció en su totalidad.
El primer recinto es la fortaleza que corona la cima de O Castro, ahora convertido en mirador. En ella podemos encontrar el monumento dedicado al empuje vigués y a los canteros.
El segundo recinto es la fortaleza de San Sebastián, en la actualidad ocupado por la Plaza del Rey y la casa consistorial. Se han encontrado pasadizos y túneles que comunicaban los castillos entre sí, y la ciudad.
En el monte de O Castro también podemos encontrarnos con el monumento dedicado a Curros Enríquez, máximo representante de la literatura gallega del siglo XIX; monumento dedicado a Martín Códax (trovador medieval); los Galeones de Rande -monumento dedicado a la batalla de Rande de 1702-; la cruz de los Caídos (monumento en honor a los caídos durante la guerra civil española); etc.
O Castro es también un magnífico parque botánico, con gran variedad de especies tanto autóctonas como foráneas. Destacan los pinos, cedros y camelias.
Fortaleza de San Lourenzo- Goián
Una de las fortalezas a orillas del río Miño relacionadas con la guerra de la independencia de Portugal del siglo XVII. Fue construida en el lugar donde se encontraba el antiguo Fuerte da Barca, cuyo objetivo era el control del paso del Miño, y tener vigilada la Plaza de Vila Nova de Cerveira de Portugal, en la otra orilla.
La historia de este bastión en la localidad de Tomiño nos traslada hasta nada menos que el año 1663. Tan sólo unos años más tarde, en 1668, el poblado sería abandonado tras la firma del Tratado de Paz de Lisboa. A raíz de tal suceso, por orden directa de Mariana de Austria, se ordenó construir la actual fortaleza de San Lorenzo de Goián para así mantener bajo control la Plaza de Vila Nova de Cerveira y toda la población que se encontraba en su frente.
En apariencia, este característico fuerte todavía mantiene su estructura con figura de estrella. Por otro lado, el recinto en su conjunto fue protegido por la ley del Patrimonio Histórico Español ya en el año 1949. La planta principal de la fortificación tiene forma rectangular, con cuatro baluartes en las esquinas y sus correspondientes garitas.
Además, el castillo de Goián se encontraba rodeado de un gran foso, que ocupaba unos 10 o 20 metros de ancho. Para poder acceder a la propiedad era necesario cruzar un pequeño puente de seis arcos, cuya fachada todavía permite distinguir los blasones de las familias Girón y Castillo. A día de hoy, del interior de la fortaleza apenas quedan rastros de las estancias existentes, si bien se sabe con certeza que Goián contaba con capilla propia, viviendas para el capellán y los oficiales, así como cuadras, almacenes y otras edificaciones de uso común.
Castillo de Doña Urraca- Salvaterra de Miño
Construido en el Siglo X, es conocido como fortaleza de Doña Urraca, y era parte del conjunto defensivo situado en los alrededores del concello para la vigilancia del Miño. Su situación y recia fábrica jugaría un papel de primer orden durante la sublevación de Portugal en 1640.
El conjunto histórico se reparte por unos 9700 metros cuadrados de superficie en el que se incluyen parte del recinto amurallado con sus garitas, la Casa do Conde, el pazo de doña Urraca y la capilla de la Virgen de la Oliva.
Castillo de Sobroso- Mondariz
El castillo en el que fue sitiada la reina Doña Urraca, domina el área entre Mondariz y Ponteareas. Es una de las joyas de la corona del patrimonio fortificado de la provincia de Pontevedra y no debe faltar en una visita a As Rías Baixas.
Una fortaleza medieval compuesta por tres elementos: una cerca exterior, que mantiene algunos tramos del trazado primitivo del siglo XII, el cuerpo residencial con dos plantas, la baja puesta para albergar el cuerpo de guardia y la torre del homenaje, que protege el único flanco por el que el castillo pudiese ser atacado.
Un conjunto imponente por sus tres estructuras de diferentes alturas y sobrepuestas unas a las otras. El castillo está custodiado por un gran parque forestal que ocupa 30 hectáreas de monte, donde conviven unas 40 especies distintas de árboles y se puede disfrutar de una bonita senda botánica.
Torre de San Sadurniño- Cambados
Situada en el islote de A Figueira, la fortaleza fue construida durante el siglo VIII o IX d. C., aunque es posible que se erigiera sobre una construcción más antigua para proteger el asentamiento de las invasiones y como vigía de la ría. Incontables batallas fueron libradas en torno a la torre con varios asedios vikingos e intentos de saqueos a la ciudad.
Torre de A Lanzada- Sanxenxo
Poco queda de la fortificación de A Lanzada, pero junto a ella tenemos un yacimiento galaico-romano, una ermita románica y un magnífico paisaje costero en donde sobresale la playa de A Lanzada.
También conocida como Torre del Padriñán, se encuentra en la parroquia de Noalla, en el municipio de Sanxenxo.
La torre se encuentra en un acantilado que domina la playa de A Lanzada, una de las playas más hermosas y populares de la región. Se trata de una torre defensiva construida en el siglo XII durante la época medieval, con el propósito de proteger la costa de los ataques piratas.
Tiene una altura de aproximadamente 15 metros y una estructura cilíndrica de piedra. Originalmente, formaba parte de un sistema de defensa que incluía otras torres a lo largo de la costa gallega. Desde la torre, se tenía una vista privilegiada de la costa, lo que permitía avistar con antelación la llegada de barcos enemigos y alertar a las poblaciones cercanas.
En la actualidad, la Torre de A Lanzada es un importante atractivo turístico y un símbolo histórico de la región. Además de su valor histórico y arquitectónico, la ubicación de la torre ofrece vistas panorámicas impresionantes del océano Atlántico y de la playa.
Torres de Oeste- Catoira
Las famosas torres de Catoira, del S. XII, eran parte de la fortaleza «Castellum Honesti», destinada al control del Río Ulla, y fueron creadas para intentar aplacar las invasiones vikingas e intentar cerrar su paso hacia Compostela.
Durante el s. XVIII las murallas aún se mantenían en pie y sirvieron para defenderse de los ataques ingleses. Declaradas Monumento Nacional, exhiben su grandeza cuando se celebra la Romería Vikinga que recuerda el pillaje de los guerreros normandos sobre los pueblos costeros de la ría de Arousa.
Castillo de Monterreal- Baiona
El primitivo recinto amurallado, de 3 Km con vistas al Atlántico data del siglo II a.c. El actual conjunto se distribuye dentro de una superficie de 18 hectáreas, combinando elementos antiguos de marcado carácter militar con los modernos creados como consecuencia del establecimiento del Parador Nacional.
Sobresalen la Puerta del Sol – la más antigua de las tres que franquean el acceso al interior -, la Torre da Tenaza antiguamente como polvorín y prisión, la Puerta Real del siglo XVI blasonada con un gran escudo de la casa de Austria, la Puerta de Felipe IV en honor al monarca, la Torre del reloj de considerable altura y coronada por almenas, y la Torre del Príncipe.
Además, en el castillo se encuentra el Museo de la Carabela Pinta, que recrea la llegada de la carabela Pinta a Baiona en 1493, tras el primer viaje de Cristóbal Colón a América.
El Castillo de Monterreal ha sido objeto de restauraciones y conserva gran parte de su estructura original. Además de su valor histórico y arquitectónico, el castillo es un lugar de gran belleza paisajística y ofrece la posibilidad de pasear por sus murallas y disfrutar de las vistas al mar y a la costa gallega.
Fortaleza de Santa Cruz- Guarda
La fortaleza se construyó en torno a 1664 para el control de la frontera con Portugal, es un importante monumento histórico y uno de los principales atractivos turísticos de la región.
La Fortaleza de Santa Cruz presenta una arquitectura militar típica de la época, con muros gruesos, bastiones, fosos y un diseño defensivo en forma de estrella. La planta es de polígono irregular, con cuatro baluartes que sobresalen de la muralla. En los baluartes se localizan las garitas labradas en piedra. En el patio de armas había capilla, casa para el gobernador, cuartel para las tropas, cortes, almacenes, polvorín, carnicería, etc; instalaciones detalladas en los planos de la época y que se conservan aunque no permanezcan restos de las mismas.
El centro de interpretación, mesas interpretativas y varias audioguías, permiten conocer la historia de la fortaleza en profundidad.
A lo largo de su historia, la fortaleza ha sufrido varias transformaciones y remodelaciones. Durante el siglo XIX, fue utilizado como prisión militar. En la actualidad, la fortaleza ha sido restaurada y se encuentra en buen estado de conservación.
Además de su importancia histórica y arquitectónica, la Fortaleza de Santa Cruz ofrece vistas panorámicas de la ciudad de Guarda y sus alrededores.
Torre de Guimarei- A Estrada
Torre del siglo XII de planta cuadrada en estado semirruinoso, a la que se adosó posteriormente el pazo, del siglo XVII, que consta de una planta cuadrangular, de planta baja y techos abovedados con piedra labrada.
La torre presenta una altura de unos 15 metros con gruesos muros. Tiene aspilleras por todos los lados y en la parte superior de cada ángulo la figura de un cañón en piedra saliente.
Castillo de Soutomaior- Soutomaior
Construido en el siglo XII, y reformado en los siglos XV y XIX, fue de gran relevancia en España y Portugal en la época medieval; Hoy en día es un referente de las fortificaciones de la provincia de Pontevedra.
El castillo se alza imponente al fondo de la ría de Vigo, rodeado por un Jardín de Excelencia Internacional, alberga en su interior un centro de interpretación.
Es una edificación con doble perímetro amurallado, de planta oval y forma irregular, en la que se abren dos entradas: la sur es la que hoy se utiliza como acceso público, siendo la primitiva la del lado opuesto.
Dos partes componen el complejo fortificado, la torre y el palacio adosado a la misma. Destaca el puente levadizo que comunica con la torre y fue un importante elemento de defensa.
En resumen, el Castillo de Soutomaior es una joya arquitectónica en Galicia, que combina historia, naturaleza y eventos culturales. Es un lugar de visita obligada para aquellos que deseen sumergirse en el pasado medieval de la región y disfrutar de sus encantadores paisajes.
Castillo de Santa María- Tebra
El monumento más emblemático de Santa María de Tebra (Tomiño) es su fortaleza, siendo además uno de los Castillos de Pontevedra más destacables. El castillo era una fortaleza medieval situada en un monte del valle del río Tebra. Su construcción inicial se remonta al siglo XIII, aunque la construcción actual es del año 1532.
El elemento más destacado del conjunto defensivo, es sin duda la Torre del Homenaje de estilo renacentista que forma parte de un pazo. Esta destaca por la anchura de sus lados y por sus cuatro pisos de altura. Entre el resto de dependencias que componen esta fortaleza hayamos un mirador, un torreón y una capilla de estilo barroco.
Hoy en día el castillo alberga un lujoso hotel, donde se realizan diversos eventos y celebraciones.
Nací en Meaño en 1938 y viví en muchos pueblos de Pontevedra, vivo en Madrid hace 50 años. Añoro