El festival Vive Nigrán presentaba su edición especial con un difícil reto: ser el primer festival del circuito Fest Galicia de la era post Covid-19.
Formato reducido, distancia entre los asistentes y otras medidas de seguridad fueron las credenciales de la última entrega del festival «Vive Nigrán», que hasta cambió temporalmente su apellido por «Picnic Club Edition«.
La celebración del 2020 del festival Vive Nigrán apagó los micrófonos y las luces tras su sold out y dos jornadas de música con grupos y solistas como Anni B. Sweet, Rufus T. Firefly, Villanueva o Dani, con un resultado ejemplar y excepcional.
La organización se mostraba satisfecha ante los resultados del primer festival musical celebrado este verano en el circuito gallego, tanto en Rías Baixas Fest, apoyado por la Deputación de Pontevedra, como en Fest Galicia, apoyado por la Xunta de Galicia.
El festival, que se desarrolló en una nueva ubicación, cambiando el campo de Lourido por las pistas de tenis de Playa América, hizo que de nuevo se oyera el eco de la música en directo con el mar de las Rías Baixas como paisaje.
Palabras del director Juan Rivas:
«Ha sido una gran responsabilidad al ser el primer festival en Galicia que retoma la actividad post-confinamiento».
«Seguir adelante con el proyecto ha sido un reto, apoyado en el compromiso del equipo de trabajo, artistas y el público amante de la música en vivo. El respeto por la actividad cultural y entretenimiento -nuestra y de nuestros compañeros- ha marcado una línea de excelencia, y este ha sido un trabajo duro del equipo de producción, y también un compromiso con la profesionalización y la calidad dentro del sector; y con el cumplimiento riguroso de la ley».
El Vive Nigrán es el primer festival de Galicia que retoma su actividad post-Covid, y se convirtió en dos maravillosas noches para el recuerdo.
El cartel de esta edición estaba conformado el viernes 17, por la artista viguesa Dani, que presentaba su primer Lp “Veinte” con un directo enérgico y bailable que presagia su gran carrera como artista.
Tras Dani, la actuación de la cantautora malagueña Anni B Sweet, que en esta ocasión estaba arropada por su banda, y que cerraría la primera jornada del festival.
La artista presentaba su álbum ‘Universo por estrenar’, con el que se ha consagrado definitivamente, haciendo además un repaso en su actuación, de buena parte de las canciones más destacadas de su carrera.
Anni es, sin duda, una de las cantautoras destacadas, y con mayor proyección del panorama alternativo del país, y uno de los referentes indie patrios del momento, como demostró en su actuación.
Su inquietud artística y ganas de desarrollarse musicalmente la han llevado a experimentar con el pop, el folk, el soul de los sesenta, el rock de los setenta, la new wave de los ochenta, e incluso con la psicodelia, dejándonos sucesivamente canciones con un mejor acabado.
Villanueva abrió la segunda noche del festival, la del sábado 18, en formato acústico, con canciones que transitan desde el rock de autor al pop sugerente y fresco, bossa nova o ritmos tribales, con melodías luminosas que dan cabida distintos estilos, y cuyas letras tienen el don de convertirse en una especie de fotografías mentales por descriptivas y detallistas.
El broche para cerrar esta edición «especial» del Festival Vive Nigrán el sábado, fue la banda de Aranjuez Rufus T. Firefly.
La banda, liderada por Víctor Cabezuelo y Julia Martín-Maestro, se ha convertido en uno de los grandes representantes del pop-rock hecho en español con raíces psicodélicas, y está considerada ya, banda de culto dentro del panorama independiente de nuestro país, como así demostró en su actuación.
Su energía y sonido profundamente sofisticado huye de lo evidente, y construye en cada producción y directo un ambiente de magia y rock, con deslices hacia una psicodelia pulcra y altamente adictiva.