En Sevilla se come muy bien. Si todavía no sabes qué hacer para la cena de Nochebuena o la comida de Navidad, hoy te traemos seis platos típicos maravillosos
Con la llegada de la Navidad, los colores alegres iluminan las calles de Sevilla y de toda España, los villancicos ya suenan en algunas tiendas y el centro de la ciudad está abarrotado. Esto claramente significa que es hora de considerar las reuniones familiares, las comidas y los platos típicos navideños.
Está claro que la cocina española es tan rica y variada que lo que solemos comer en una casa de Andalucía es muy diferente a lo que comemos en una casa del País Vasco, lo que sigue siendo una paradoja muy común. Incluso en la casa de nuestro vecino puedes comer algo muy diferente si es extremeño o castellano-manchego etc.
Por ello, hoy analizamos platos típicos de Navidad en Sevilla, siguiendo el consejo de expertos. El jamón serrano no es solo el rey de estas fiestas, también es el rey de todos los festejos. Este manjar, que es el principal símbolo de la cocina nacional, no debe faltar en ninguna fecha en particular, y menos en Navidad. Un queso bien curado y de excelente sabor, sobre todo maridado con un buen vino, puede convertirse en una estrella en cualquier mesa.
1. Solomillo de cerdo relleno
Para nuestro plato principal, no debemos olvidarnos del cerdo. Probablemente sea el más utilizado en las casas de Sevilla. Es una opción más barata, a menudo más fácil de preparar y popular entre todos. Si eres de esas personas que no tienen muchas habilidades culinarias, lo encontrarás en cualquier supermercado.
2. Cerdo asado
No hace falta ir a Segovia para encontrar este manjar en la mesa navideña, porque aunque no es el más habitual, todavía son muchas las familias en Sevilla que deciden utilizar este plato para sumar puntos, que es igual o más atractivo que el relleno de pavo.
No hay duda de que si sabes cómo prepararlo, serás muy feliz. Pero ten cuidado, aunque no creemos que su familia lo cortará con el borde del plato y lo estrellará contra el piso. Siempre hay un cuñado que se emociona.
3. Cordero asado
Es un gran sustituto del pavo y te hace lucir mejor porque tiende a ser una carne jugosa y sabrosa. Prueba aromatizar con miel para una sensación dulce, o si esto no funciona, usa vino blanco o hierbas como brandy y romero. Si lo combinas con unas buenas patatas, es imposible no hacerlo bien.
4. Pavo relleno
Aunque mucha gente piensa que solo aparecen en películas americanas, casas de muchos países exhiben un espectacular ejemplar de esta ave en el centro de la mesa, como si fuera un trofeo. Horneado a la perfección, lleno de sabor, tienes un plato principal que recordarás hasta el año que viene al menos.
5. Sopa de picadillo
Un buen caldo nunca vendrá mal para bajar todos estos alimentos, que te dejarán muy llena. En estas ocasiones se cena cada vez más tarde, por lo que el caldo tiende a sentar bien. Cuando lo combines con jamón, huevos duros y cubitos de pan, tendrás un plato irresistible.
6. Mariscos
Las gambas y langostinos, ya sean frescos o a la plancha, sin duda nunca fallan, pero si quieres impresionar por completo a tus invitados, siempre puedes tirar la casa por la ventana, poner un cuenco en el centro de la mesa, y servir unas cangrejos de río, gambas, bogavantes … De todas formas, las posibilidades del marisco son infinitas.