Estamos en veranito y por eso este mes nos vamos a la Playa-220 para charlar con Aida y Javier, dos arquitectos por la Universidad de Alicante que andan detrás del Taller Topotesia. Desde allí han decidido construir un festival en nuestra provincia del 1 al 7 de agosto para reactivar el pueblo de Vallecillo (Sahagún) y conquistar el desierto. Las entradas ya están disponibles en Wegow Tickets.
Charlas en la Playa-220
¿Qué nos podemos encontrar en la Playa-220?
Sobre todo mucha diversión y proactividad.
Partiendo de esa base, el festival Playa-220 está formado por diversos talleres impartidos por profesionales donde se trabajarán temáticas relacionadas con la Arquitectura, el Diseño, la Fotografía, la Ilustración… fomentando el carácter multidisciplinar que persigue el festival.
Lo que hace diferente a estos cursos, es que los participantes serán los que pongan sobre la mesa sus propuestas e ideas, las desarrollen y las construyan con sus propias manos. Todo siempre envuelto con un ambiente fresco, joven y súper dinámico, que acabará con una gran fiesta junto a la gente del pueblo.
Vamos a encontrarnos un nuevo modo de hacer las cosas. Gente que se combina, mezcla sus ideas, ofrece sus habilidades y juntos tratan de actuar y cambiar realidades con las que no están satisfechos.
¿Cómo surge la idea de montar un festival de estas características en nuestra provincia?
Ambos, Aida y Javier, realizamos nuestros proyectos finales de Arquitectura sobre la problemática de la región (y de tantas otras): patrimonio arquitectónico y cultural que se pierde, poblaciones que desaparecen y un proceso de desertificación demográfica bestial. Durante el desarrollo de dichos proyectos, surgió una idea, Playa-220, y nos dimos cuenta de que esto era posible. Cogimos un tren y empezamos la aventura.
¿Por qué Playa? ¿No falta el agua entre tanta arena?
Nosotros que venimos del Levante y convivimos con el salitre del mar llegamos para insertarnos en la Meseta más profunda, en el desierto demográfico, en un trocito de la España Vacía. Fue por esto que nos pareció interesante mezclar ambos conceptos, el de desierto y el de mar.
Y esto habla mucho de la filosofía que persigue el proyecto, pues la idea de playa aporta otras muchas connotaciones, más allá de la arena o el sol, como son el dinamismo, la alegría, el pasar un buen rato, la energía, etc. ¡Esas son las cosas que vamos a instalar este verano en Vallecillo!
¿Por qué en Vallecillo?
Vallecillo y su zona, la Tierra de Campos leonesa, reúnen unas condiciones particulares muy especiales. Por un lado, un estado cercano al colapso a nivel social y cultural, por una razón muy sencilla: la pérdida de población. Esa es la causa que mantiene un bucle infinito en el que no hay gente, por lo cual no hay actividad, por lo cual no hay gente, por lo cual no hay actividad, etc. Y mientras, los edificios se caen, el legado material e inmaterial de estas regiones se pierde.
SIN EMBARGO, toda esta región cuenta con algo impresionante que podría ayudar a cambiarlo todo: unas comunicaciones bestiales. Autovías, aeropuertos, trenes normales y de alta velocidad, etc. Por esas infraestructuras puede venir gente de toda España. ¿A qué? A lo que tú quieras. Nosotros proponemos que a cambiar las cosas. Nuevas ideas, nuevos planteamientos, ganas de hacer cosas. Transformar.
¿Consideráis que está preparada nuestra provincia para una propuesta tan arriesgada como esta?
El derrotismo está muy instalado. Es una cuestión casi histórica. Desde hace tiempo sólo se habla de pérdida de oportunidades, del declive de estas regiones que no son ni centro ni costa. El mundo rural, el mundo minero, etc. son muchos aspectos reunidos aquí y no utilizados para remarcar el inmenso potencial de León, sino para lamentarse: ese empeño en que “tal cosa es mejor” (esa “cosa” siempre está en otra provincia, en otra comunidad o en otro país). Al final todo eso cala en la sociedad.
Ahora bien, eso es precisamente lo que sitúa a la provincia de León en una muy buena posición. Es como un muelle, un resorte o un efecto rebote: hemos encontrado muchas ganas de cambiar las cosas, de actuar e intervenir. Sólo falta juntar esfuerzos y coordinarnos.
¿Cómo ha sido la respuesta de las instituciones a esta iniciativa?
¿Os somos sinceros? Está muy relacionado con la respuesta anterior. Los abanderados del derrotismo pasivo suelen ser políticos y administradores. No en un sentido negativo, pero la estabilidad de sus posiciones les incita a la comodidad del inmovilismo, aunque eso te mantenga en una situación insatisfactoria. Es más seguro quedarse parado que arriesgar e intentar algo. No pensamos que tenga un trasfondo negativo intencionado, pero sí consideramos que hay una falta de arrojo. Al exponerles el proyecto, les parecía genial. A la hora de arremangarse y tirarse al barro, venían las dudas que derivaban en un “no”.
Sin embargo, no todas las instituciones son así. Las hay más pequeñas y especializadas, o instituciones educativas o emprendedoras con otra visión y actitud. Aunque al final, lo importante es que la diferencia la marcan las personas, y hemos encontrado a algunas fantásticas. Son ellas las que están haciendo posible Playa-220.
La respuesta del pueblo, condensada en la figura de su alcalde, Javier Lagartos, ha sido impresionante. Comprendió el proyecto y las consecuencias que podría tener para su municipio instantáneamente. Y, aún sin grandes recursos, estamos trabajando codo con codo utilizando precisamente lo que más nos sobra tanto a Taller Topotesia como al Ayuntamiento de Vallecillo, que es muchísima ilusión y el saber que esta idea puede ser fantástica.
¿Cuáles son vuestras expectativas reales?
Son las de iniciar un proceso. Llegó un punto de inflexión en el que decidimos que lo importante, la clave, era realizar la primera edición de Playa-220 sí o sí. Demostrar, aunque sea a pequeña escala, lo que puede hacerse cuando hay ganas y energía. Tenemos claro que el mejor ejemplo, la mejor explicación de nuestro proyecto, va a ser hacerlo realidad.
La idea es asentarse en Vallecillo o ¿tendrá carácter itinerante el proyecto?
Bueno, esto va de reactivar económica y socialmente una población. Ese objetivo puede no tener fin, pero consideramos que lo importante es la chispa, el detonante.
Más que un proyecto itinerante, es un proyecto replicante: la intención es que este prototipo que va a surgir en Vallecillo podamos reproducirlo, una vez comprobado su éxito y corregidos sus fallos (que los tendrá), en otros lugares de problemáticas similares. Tenemos que revelaros que ya estamos fijándonos en posibles candidatos, desiertos de esos que tanto nos gustaría ver convertidos en oasis.
Centrándonos en esta primera edición del Playa-220 ¿Qué es lo que no debería perderse nadie de todo el programa?
Sin duda alguna el punto fuerte del festival son los talleres propuestos, ya que son el motor alrededor del cual va a girar todo el festival. Unos talleres en los que el proceso creativo y el trabajo en equipo van a ser los presidentes.
Aunque todo el conjunto del festival está concebido como una fiesta, no nos podemos olvidar de resaltar ese cierre de Playa-220 que tendrá lugar del viernes 5 al domingo 7 de agosto, cuando todas las ideas trabajadas se expongan públicamente, se estrenen las intervenciones realizadas en las calles y bodegas del pueblo, y se realicen conciertos y exposiciones. Todo junto a las fiestas patronales de Vallecillo, convirtiéndose todo en una gran verbena mesetaria.
Y algún artistas/ponentes/invitados que os haga especialmente ilusión tener en el Playa-220?
Es imposible elegir pues estamos muy emocionados con todos y cada uno de los confirmados (hasta el momento) de Playa-220. Hemos tenido mucha suerte, pues todos son gente muy talentosa, con unas capacidades envidiables que llevan entre manos proyectos y trabajos de una calidad y magnitud espectaculares. Nos sentimos muy identificados con ellos en el sentido de que son gente joven que trabaja muy duro cada día por abrirse camino y sacar adelante sus creaciones, proyectos y sueños.
Es decir, os recomendamos participar en el 100% del festival 😉
Para el que nos esté leyendo ¿Cómo se puede formar parte de esta revolución que intentáis llevar a cabo?
Muy sencillo. Esto va de levantarse de la silla y actuar. Es verano y somos jóvenes, de modo que esto también consiste en pasárselo estupendamente.
Es decir, para ser partícipe de nuestra pequeña revolución tan sólo hay que coger la mochila y una tienda de campaña, apuntar tus ideas y tener las ganas de pasar un verano genial haciendo algo muy distinto: colaborar montando una fiesta en la que fluirán las ideas y el buen rollo con tal de cambiar las cosas.
El outfit festivalero de Playa-220 sabemos que va a ser, junto a las libretas y los botes de pintura, un brillo en los ojos especial: el que tienes cuando sabes que estás haciendo cosas guays.
Desde aquí os animamos encarecidamente a que os unáis a Playa-220. Es un evento diseñado desde y para nuestra generación: un modo distinto de hacer las cosas, un inconformismo ante las situaciones desfavorables y unas ganas bestiales de no quedarnos parados.
Mucha suerte, ánimo. Desde la Guía Go! León apoyamos a tope esta iniciativa…
Las entradas para el Festival Playa-220 ya están disponibles en Wegow Tickets.