HISTORIA DEL BARRIO LA CARTUJA BAJA
Ubicada a las afueras de la ciudad de Zaragoza (carretera de Castellón, Nacional 232) y hoy núcleo fundamental del actual Barrio rural llamado Cartuja Baja, el monasterio de la Inmaculada Concepción se debe a don Alonso de Funes y Villalpando (+1630), noble caballero zaragozano, Regidor del Hospital de San Felipe y Santiago y Diputado del Reino, quien tuvo la iniciativa de fundar una nueva cartuja en tierras aragonesas, al establecer en su último testamento, redactado el 10 de julio de 1629, que a la muerte de su esposa toda su hacienda debía de pasar a los monjes cartujos con el fin de que levantasen un cenobio bajo la invocación de la Inmaculada Concepción.
No obstante, si bien es cierto que la idea partió de don Alonso, la verdadera impulsora y ejecutora del proyecto fue su temperamental esposa, la rica heredera doña Jerónima Zaporta, nieta del famoso banquero Gabriel Zaporta quien al morir su marido (1630) se sintió responsable de cumplir sus deseos, resolución que le llevó no sólo a guiar directamente esta importante empresa, sino también a prometer el legado de su propia fortuna personal. La redacción de la Capitulación y Concordia de la fundación de la cartuja tuvo lugar el 20 de agosto de 1634. Por un tiempo la fundación se ubicó en un emplazamiento, cercano a la villa de Alcañiz, llamado Torre de los Martucos o Torre de la Fuente de los Martucos, pero finalmente, en el año 1643, los monjes se instalaron en la llamada Torre de las Vacas o de Martín Cabrero, en las cercanías de Zaragoza, lugar que, constituiría el definitivo emplazamiento del monasterio.
Lo cierto es que la cartuja de la Inmaculada Concepción fue una fundación con una saneada economía. Además de las rentas legadas por sus fundadores, con el paso de los años y sobre todo en el siglo XVIII, fue adquiriendo nuevos bienes y propiedades, gracias a las limosnas y donaciones, el encargo de misas, el trabajo de los hermanos y los beneficios que iba obteniendo de sus rentas, hasta convertirse en una cartuja con abundantes medios y recursos que poseía una gran cantidad de fincas y propiedades rústicas y urbanas (algunas de ellas arrendadas). De hecho, la cartuja de la Inmaculada Concepción pudo permitirse contribuir económicamente en varias empresas de carácter benéfico y pudo también ayudar económicamente a la cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes (Huesca). También gracias a los medios económicos con los que contó su comunidad se pudo levantar un monasterio muy amplio (con 37 celdas) que se inició en 1651 (fecha de la colocación de la primera piedra), que fue concluido en sus partes esenciales en el año 1767, y mejorado en el curso del tiempo. Lamentablemente las leyes y decretos desamortizadores promulgados por el gobierno español en la primera mitad del siglo XIX, dieron fin a la vida monástica de esta cartuja. El monasterio pasó a mano de particulares que lo habitaron y lo transformaron dando lugar al barrio rural zaragozano conocido como Cartuja Baja.
Declarado como Conjunto de Interés Cultural, todavía permanecen en pie varias de sus dependencias que van siendo restauradas de acuerdo con el Plan Especial de protección y reforma interior del conjunto histórico-artístico de la cartuja de la Concepción.
Edificios de interés Cartuja de la Inmaculada Concepción:
Hospedería
Era el edificio destinado a albergar a los huéspedes de la Cartuja. Por su vocación eremítica (búsqueda de aislamiento y soledad), los cartujos sólo permitían la entrada a hombres del clero, benefactores, amigos de la casa o ilustres dignatarios. Sus hospederías no eran tan concurridas como las de los monjes de otras órdenes religiosas. En algunos casos (como el que nos ocupa) las hospederías tenían dependencias que servían de bodega y almacenaje.
Procura
Servía de residencia de los hermanos para ejecución de las diferentes actividades domésticas. El piso inferior contaba con un gran espacio de entrada y un largo pasillo con habitaciones a ambos lados. El piso superior además de las escaleras presentaba también habitaciones ambos lados, que, probablemente, eran las celdas para los hermanos que residían en el monasterio. Había además estancias con otras funciones: una capilla, un cuarto con un arca, depósitos de variados alimentos y almacenes de licores y cebada, etc.
Iglesia
Un barroco clasicista. En la fachada se disponen dos cuerpos separados por cornisa y molduras. El primer cuerpo presenta tres arcos de medio punto. El segundo cuerpo lleva un gran recuadro central coronado por un frontón partido, curvo, que sigue el juego de curvas y contracurvas. Está rematada por pináculos con decoración de cerámica.
La torre, con tres cuerpos de planta cuadrada y uno superior de planta octogonal, culminado por un chapitel y veleta, sigue el mismo estilo de la fachada de la iglesia. EL CIMBORRIO octogonal, correspondiente a la cúpula sobre el crucero.
Sala Capitular
La Sala Capitular es una de las dependencias más importantes de los monasterios cartujanos. En ella los padres, presididos por el prior, se reunían en comunidad y trataban todos los asuntos relativos a la fundación, desde los más trascendentales hasta los más cotidianos.
Refectorio
El refectorio era la dependencia donde, en los días festivos, los monjes (padres y hermanos), comían en comunidad. Las comidas se realizaban en completo silencio, mientras un monje leía algún texto de carácter espiritual. Rehabilitado íntegramente, se ha recuperado su espacio interior original para uso sobre todo cultural. Se inauguró en 2005.
Gran Claustro
Es el núcleo fundamental del monasterio cartujano y el elemento más característico de la arquitectura de la Orden de San Bruno. En torno a él se disponen las celdas donde viven los padres cartujos. El claustro se unía a los claustrillos de capillas y del refectorio mediante sendos pasillos de ubicación simétrica con respecto al eje de la iglesia.
Está formado por cuatro largas galerías que delimitan un espacio cuadrado de grandes dimensiones. En el centro de ese espacio se situaba el cementerio. Las galerías del claustro, actualmente calles, tenían la función de dar acceso a las celdas y otras dependencias de uso común, como claustrillos, refectorio, sala capitular, iglesia, etc.
Celdas
Todas las celdas se construyeron en ladrillo y eran dependencias extremadamente sobrias, tanto en su interior como en su exterior, de acuerdo con el principio de simplicidad de la orden. También existían otras celdas más especializadas: las de los padres sacristán y ayudante de sacristán, que se ubicaban cerca de la iglesia, además de la celda de la enfermería.
Celda del Prior
Se componía de dos edificios construidos en ladrillo de sobrios y lisos exteriores, con un jardín en común. El de mayores dimensiones presenta planta rectangular con eje transversal a las galerías del claustro y se cubre con tejado a doble vertiente. Sobre el tejado se eleva un pequeño cimborrio de planta cuadrada que se corresponde con la capilla que había en su interior.
Tenía alcoba, salón de estudio, comedor y un pequeño oratorio. De este oratorio queda la cúpula sobre pechinas con pinturas murales, con el escudo de los fundadores.
Portería
Edificio de entrada a la Cartuja y único punto de contacto con el exterior. En ella residía el hermano portero, fraile encargado de vigilar el restringido acceso al monasterio. También era el que repartía alimentos y limosnas en la puerta. Era usual que se acercaran de las poblaciones cercanas (sobre todo del Burgo de Ebro) a solicitar algún tipo de comida. Anexa a esta dependencia se encontraba la caballeriza.
Claustrillo de capillas y de refectorio
Era de pequeñas dimensiones y estaba constituido por cuatro galerías y un patio interior de planta rectangular. Como todo claustro, tenía como misión organizar y comunicar las dependencias de uso común que estaban construidas a su alrededor. El claustrillo del refectorio estaba situado en ubicación simétrica al claustrillo de capillas, aunque era de menor tamaño que éste.
Iglesia interior
La iglesia tiene planta de cruz latina, con una nave de cinco tramos y presbiterio de un tramo con cabecera recta. Muestra todas las características propias de los templos cartujanos. Cubierta con bóvedas de cañón con lunetos en la nave y brazos del crucero. Cúpula sobre pechinas, con tambor y linterna en el centro del crucero. Tenía un bello pavimento de azulejos romboidales vidriados en colores en azul, blanco y verde (también hay amarillos en el presbiterio), que conforman una curiosa composición de tipo geométrico. En el presbiterio, en el lado del evangelio, están sepultados ambos fundadores.
Oficina del horno, criados y labranza
En este conjunto podía encontrarse un horno de gran tamaño y un lugar para amasar el pan; depósitos para los alimentos; una serie de estancias para los criados, como un refectorio, un calefactorio para los criados y una cocina específica, con infiernillos y fuego, para guisar carne para invitados y criados que necesitaban alimentación fuerte para cultivar la tierra (los cartujos tienen prohibido el consumo de carne); un establo, una cuadra, un pajar, un cubierto para carros y una habitación para los religiosos encargados de estas dependencias.
Muralla
Edificada en ladrillo, la muralla conformaba un gran rectángulo de eje mayor Norte-Sur. Los lienzos eran lisos y sin ninguna ornamentación. Presentaba un total de 29 torreones de planta ultrasemicircular que tenía la misión de amenizar estéticamente la lisura del muro y reforzar su estabilidad. Tales torreones además pudieron servir como espacios de almacenaje, aunque Zapater y Gómez que visitó la Cartuja en 1846 dice que en los cubos murales existían capillas. La altura de la muralla se sitúa aproximadamente en 3,60 metros, medida sobre los restos actuales mejor conservados, y el perímetro del recinto es de 1.320 metros.
Escudo
El monasterio de La Cartuja tiene los escudos de los dos fundadores. Es un escudo complejo, cuartelado en cruz, en el que figuran las armas de Villalpando y Funes, en el lado izquierdo según se mira y Zaporta y Albión en el derecho.
Visitas guiadas:
- Para visitar el conjunto Histórico-Artístico, contacta con la Junta vecinal: [email protected]
Tfno: 976 726 181 (horario de mañana)
- Visitas teatralizadas y/o visitas programadas, contactar con GOZARTE: [email protected]
Tfno: 976 207 363
- Para visitas de escolares, pueden visitar la Guía Educativa del Ayuntamiento de Zaragoza.
Fiestas y tradiciones:
El 17 de enero, festividad de San Antón: tradicional hoguera donde las Damas y los Quintos reparten patatas asadas, chorizo y longaniza.
El segundo jueves de febrero, Jueves Lardero: reparto de longaniza. Evento amenizado por la Comparsa de la Cartuja con los gigantes y cabezudos.
El 5 de marzo, Cincomarzada: comida popular, concurso de ranchos y actividades organizadas por las diferentes asociaciones del barrio, para todas las edades.
El 23 de abril, San Jorge: actividades didácticas, intercambios de libros, y comida popular.
En el mes de junio, Fiestas de primavera: muestras de asociaciones, bailes y conciertos, feria de Andalucía, Fiesta de la Cerveza, presentación de Damas y Quintos. Hoguera de San Juan, concurso de relatos.
Mes de agosto, Fiestas de San Roque: fiestas mores, música, actividades tradicionales, comidas populares.
Halloween: este días, un grupo de vecinos y vecinas del barrio se caracterizan y tematizan el edificio de la Portería. Bienvenidos a este túnel del terror.
Fiesta de Fin de Año: bienvenida al nuevo año en el pabellón deportivo
ENTORNO NATURAL
El Galacho de la Cartuja, junto con los de la Alfranca de Pastriz y El Burgo de Ebro, es una Reserva Natural situada en el tramo medio del valle del Ebro, unos 10 Km. Aguas debajo de la ciudad de Zaragoza. Tiene 1.700 metros de largo y 150 de ancho, 6 hectáreas de aguas libres y 15 de vegetación de humedal.
Esta Reserva Natural alberga uno de los ecosistemas ribereños mejor conservados de Aragón: tres antiguos meandros del Ebro, abandonados por sucesivas modificaciones del cauce del río, que en Aragón se conocen con el nombre de Galachos.
Estos lugares constituyen un excepcional conjunto de zonas húmedas que contrastan con la aridez de la Depresión del Ebro. Como consecuencia de estas especiales condiciones, aparece una exuberante vegetación donde encuentran refugio una importante variedad de especies animales. Hay más de 200 especies de aves, destacando el martinete y las garzas, y entre los mamíferos, el jabalí, la jineta y la nutria.En cuanto a la flora, la reserva contempla sotos con álamos, chopos y fresnos; cañaverales; sauces, etc. Sobre la orilla un tamarizal y la playa de gravas, y miradores sobre el río.
A continuación, los caminos y rutas a realizar:
CAMINO NATURAL DEL EBRO DE ZARAGOZA A LA CARTUJA BAJA
https://zaragozanda.zaragozadeporte.com/docs/R04_zgzanda.pdf
RUTA CANAL – LA CARTUJA BAJA
https://zaragozanda.zaragozadeporte.com/docs/R05_zgzanda.pdf
CAMINO NATURAL LA ALFRANCA. ITINERARIO 2
RUTA LA CARTUJA BAJA – LA ALFRANCA
https://es.wikiloc.com/rutas-mountain-bike/la-cartuja-la-alfranca-btt-31633689
EL GALACHO DE LA CARTUJA Y EL SOTO DEL FRANCÉS
https://senderosturisticos.turismodearagon.com/ruta/ficha/237
https://www.rutasaragon.net/el-galacho-de-la-cartuja-y-el-soto-del-frances
LA CARTUJA-EL BURGO-FUENTES DE EBRO-CMNO VALRUGA-RODÉN-LA SALADA-VALDEVARÉS-CMNO.TOMOSO-VALDELARREINA-CR41-CUESTA ROYO
RUTA GPS EN BICI DE MONTAÑA: ZARAGOZA – LA SALADA – ZARAGOZA
https://fotopedaleando.blogspot.com/2019/06/ruta-gps-en-bici-de-montana-zaragoza-la.html